La SGAE huele a incienso. Confidencial cofradiero

Nos cuentan de muy buena tinta que la Sociedad General de Autores está dispuesta a ejercer sus derechos en la carrera oficial. Es decir, a poner la mano por las marchas de autor que se interpreten en el itinerario obligado para las hermandades. Veremos cómo se arbitra la medida, qué reacciones depara, qué papel juega el Consejo y, sobre todo, a quiénes va a parar el dinero recaudado. ¿Y si fuera a una entidad benéfica para así acallar las críticas de quienes estén en contra de la medida? ¿Pero quién promete que se obraría igual para 2007? Mucha atención a la creación de un precedente, aunque sea con la 'anestesia' de poner por delante a una entidad benéfica.

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