En memoria de Antonio López, "El López"
Se han apagado la fragua, el compás y la sonanta.
Ha enmudecido la zambra, el martinete y los tientos canasteros.
Se ha marchado despacito, sobre los pies poco a poco, con el mismo son que andan sus hijos y costaleros, del Cristo que muestra al viento como derrama su sangre, brotando por Cinco Llagas.
Maestro de los martillos, gitano cabal y noble, humilde, bueno y sencillo.
Voz quebrada de metales, heredados por la sangre, que se funden en la fragua y que al aire regalabas con arte y con sentimiento.
Siempre en mi corazón, primo "López", tu recuerdo, tus hechuras tan flamencas y tus vivencias de cal.....
La luna dejó la fragua y te tomó de la mano, para llevarte a las puertas de la Casa de Undivé, el Bato de la Salud y que descanses en Él, con la eterna compañía de la carita morena, de dolor y las Duquelas, de la Batita María y Angustias de los calé.
Siempre, siempre, siempre, en mis recuerdos, Antonio.
Dios te guarde primo "López".
Irene Gallardo Flores.