Antonio García pregonó a las Glorias de Sevilla bajo la mirada de la Virgen de la Cabeza

Daniel García Acevedo. Ayer viernes, 29 de abril, tuvo lugar el pregón de las hermandades de glorias, en el altar mayor de la Catedral y pronunciado por el cofrade macareno Antonio García Rodríguez.

Antonio pronunció un texto integro en prosa, en el que fue narrando historias vinculadas con la Virgen María como hilo argumental, durante una hora y quince minutos, para ir enlazando a todas las hermandades letíficas.

La pieza está titulada como Amor de los amores de Sevilla, y García Rodríguez se lo decida a su esposa Lola y su hija Margarita, la Gloria que dan luz a su corazón.

Son destacables la parte dedicada a Margocha, niña Bielorrusa que el pregonero y su familia lleva años acogiendo y que pidió ser bautizada para no estas nunca más sola.

También emotiva la pronunciada a la Virgen de la Salud de San Isidoro, o la de la Divina Pastora de las Almas.

Antonio terminó con la Virgen del Rosario de la Macarena, donde fue de niño y allí se quedó, con este texto para finalizar el pregón:

“Aquel niño, que buscaba ansioso junto quien le dio el ser, la carita nacarada de la Virgen del Rosario, en las calendas del otoño de su infancia, hoy, humilde y sencillamente, ha intentado pregonar su amor a Quien tanto le dio, a Quien premió su vida anclando la Esperanza a su corazón y recuerda la mano de quien le guió hasta allí, donde hubo huertas y hombres que soñaron con Ella, y le enseñó aquella letanía hermosísima dedicada a la Virgen bonita que sirvió para conseguir todos su fines y solicita al Cristo, al Niño que llevaba en sus manos el Rosario donde se encadenan su vida, sus emociones, sus recuerdos y vivencias, le pide al Niño bonito que sueña y proyecta sueños sobre el hombro virginal de María, que no se olvide de él, que siga posibilitando el reposo de su espíritu, que no desatienda sus ruegos, que quiere volver a vivir aquella tarde de ensueño, la tarde de un domingo de octubre, cuando llegó a la Macarena de la mano de su madre.”

En la presidencia del acto estuvieron el Arzobispo de Sevilla, Juan José Asenjo, el delegado de hermandades, Marcelino Manzano, la subdelegada del gobierno, Felisa Panadero, la junta superior del Consejo de Cofradías y el delegado de Fiestas Mayores, Juan Carlos Cabrera, que se encargó de presentar al pregonero.

Intervino la Banda sinfónica municipal de Sevilla que interpretó las marchas “Rosario Macareno” de José Albero y “Glorias de Sevilla” de Manuel Marvizón y los himnos al finalizar el acto.

Galería del Pregón:

Fotos: Juan Alberto García Acevedo.