La Parroquia de la Asunción en Guadalcanal ultima la restauración de su torre

Arte Sacro. Las obras de restauración de la torre de la iglesia parroquial de Santa María de la Asunción, en Guadalcanal, encaran su fase final, una vez concluidas las actuaciones previstas en la torre y a expensas de la recolocación de las cinco campanas que se encuentran actualmente en diversos talleres. Cuatro de ellas se están restaurando en la localidad jiennense de Torredonjimeno y otra soldándose en Alemania. Una vez que se devuelvan las campanas al campanario se retirará el andamio que ha cubierto la torre durante todo el proceso restaurador.

En la obra de restauración ejecutada se ha tratado de conjugar la funcionalidad de la torre como elemento complementario de la iglesia y su liturgia con las propias necesidades de registro, mantenimiento y conservación del bien. En este sentido, se ha abordado la recuperación de la torre de una manera integral, con el objetivo general de devolver al mismo unas condiciones de seguridad, habitabilidad y funcionalidad compatibles con sus necesidades de uso actuales. Igualmente, la intervención ha detenido el proceso de deterioro, fundamentalmente provocado por intervenciones desafortunadas a lo largo del tiempo y por la falta de un mantenimiento y de unas labores de conservación sistemáticas y especializadas. Se ha intervenido específicamente sobre los paramentos de ladrillo interiores y exteriores, limpiando y consolidando la fábrica. Igualmente, se ha diseñado un sistema de estanqueidad al agua, compatible con la ventilación e iluminación natural de las estancias de la torre. Se ha restaurado el sistema de campanas, recuperando también el uso de la antigua matraca. Adicionalmente, se ha ejecutado una nueva instalación eléctrica y de iluminación funcional y ornamental con criterios de ahorro energético y sostenibilidad. Por otra parte, la intervención se ha ejecutado pensando en facilitar las futuras labores de conservación del propio bien de manera programada en el tiempo.

Torre del siglo XV

La torre parroquial se comenzó a construir en los años de transición del siglo XV al XVI sobre los restos de la antigua muralla y fortaleza almohade de la localidad, datada en el siglo XII. Fue sufriendo modificaciones y añadidos en los siglos posteriores, aperturas de huecos, instalación de campanas, adiciones ornamentales, etc, hasta entrar en un periodo de deterioro durante la segunda mitad del siglo XX.

El estado de conservación general de la torre era deficiente, con daños generalizados en la masa de ladrillo, perdiéndose la geometría y los volúmenes en algunos elementos puntuales e incluso en el propio alzado de la torre, donde llamaban la atención las redes provisionales instaladas en el año 2008.  Destacaban elementos concretos en estado ruinoso o demolidos y daños abundantes provocados por la entrada del agua y de los animales al interior de los recintos de la torre.

Fotos: Archivo Archidiocesis de Sevilla

Fuente: archisevilla.org