Sevilla Información. Unas 4.000 personas vibran en la Plaza de España con los sones del espectáculo 'Tierra ¡y qué no nos falte de ná!' de Pascual González y Cantores de Híspalis

Sevilla Información. El grupo sevillano conmemora el V centenario de la vuelta al mundo de Magallanes con un concierto gratuito del espectáculo 'Tierra ¡y qué no nos falte de ná!.

Unas 4.000 personas vibraron en la noche de ayer en la Plaza de España con el espectáculo 'Tierra ¡y que no nos falte de ná!', con el que el creador sevillano Pascual González, compositor, poeta, cantautor y miembro fundador de los Cantores de Híspalis y su mítico grupo, han conmemorado el V centenario de la vuelta al mundo iniciada por Fernando de Magallanes en 1519.

Durante dos horas de explosión de colores, música y baile, González y los Cantores --Juani Calceteiro, Carlos Ruiz, Alejandro Hernández y Diego Benjumea-- pusieron en escena su nuevo trabajo musical titulado 'Tierra', un espectáculo dedicado a esta primera circunnavegación, cuya entrada ha sido gratuita y que ha cumplido con todas las expectativas de la organización, liderada por el Ayuntamiento, junto a la Fundación Cajasol y la Diputación de Sevilla.

Sobre las tablas de un gran escenario el grupo sevillano comenzó a fascinar al público asistente con más de media hora de música ininterrumpida con temas de su último trabajo como 'Qué bonita es mi tierra', 'Que suene el rondo',  'Cinco carabelas', 'Arza toma y toma', 'Mi casa', 'Los niños de mi niña' o 'Que me quiten lo bailao', entrelazando toda clase de estilo flamenco más andaluz con guitarra eléctrica, maracas, bajo, batería, piano e incluso saxofón y los bailes del octeto de bailarinas 'Feria' y de las bailarinas Arelys Savón Beltrán y Ayamey Villa del Conjunto Folclórico Nacional de Cuba. También se subió a las tablas el coro 'La Caleta' de Julio Pardo y los niños de la Escolanía de la Santísima Trinidad de Alcalá de Guadaíra.

Durante el espectáculo, con un gran contenido audiovisual, en el que la Tierra fue el impulso de un viaje alrededor del mundo, los Cantores navegaron fusionando música de distintos confines, desde la más arraigada esencia ancestral del folklore hasta la máxima vanguardia en música andaluza ofreciendo la circunnavegación musical de la Tierra, a través de sus éxitos más populares y convirtiendo el escenario en la alegría sin límites donde cantaron y bailaron al compás de un carrusel de grandes obras de la historia de la música popular de esta tierra.

Tras un breve descanso, se presentó de nuevo el grupo sevillano, ya con su atuendo habitual de traje negro para entregar su verdadera esencia de Cantores con un repertorio de sus grandes éxito como 'Qué vivan las sevillanas', 'Vámonos pa Jerez', 'Tócala, tócala', así como los famosos 'Qué no nos falte de na', 'A bailar a bailar' y 'Quiero cruzar la bahía', entre otros temas, que hicieron vibrar a todo el público concentrado en la Plaza de España trasladándolo a otra época de las sevillanas.

En conjunto, todos los presentes pudieron disfrutar de una magnífica aleación de coplas y danzas, puestas al servicio de una bandera: la de su cuna-tierra por la que, como máximos exponentes del folklore, tienen una mirada constante hacia el futuro a la par que una férrea lucha por salvaguardar sus costumbres, sus tradiciones y su historia en un trabajo musical, que ha contado con la dirección musical de José Carlos Seco.

Pascual González volvió a subir a un escenario en febrero de 2018 con su obra 'Cristo. Pasión y Esperanza', con la que cosechó grandes éxitos y con la que resurgió de un largo vía crucis, tras 16 operaciones de garganta y acabar laringectomizado, para darse vida a sí mismo, a este trabajo y viajar a Israel, la Tierra Santa, para conocer de primera de mano y recorrer los pasos de Jesucristo, y hace unos meses decidió emprender esta aventura musical, que le ha llevado a seguir los pasos del marinero portugués por Santiago de Chile y recorrer la Patagonia donde ha grabado parte de los temas que forman parte de este trabajo por diferentes puntos de la ruta magallánica, culminando el viaje en Sabrosa, localidad natal de Magallanes, Oporto, Fátima y Lisboa.