Y Dios anduvo entre los hombres. Antonio Sánchez Carrasco

Miércoles de Pasión noche calurosa de azahares en el suelo. En el Tiro de Línea la gente se agolpa en la puerta marrón de la iglesia. Nadie sabe nada y todo el mundo lo sabe todo. Dios está en el suelo, a los pies de su Madre. Se cierran las puertas hay que prepararse que Dios debe andar hasta su paso para el Lunes Santo. Fuera empieza la impaciencia. Muchas caras conocidas. Casado tu camarógrafo, Raúl que también guardó a tu Madre en otoño en su camino a la Catedral. Se abren las puertas y empiezan los nervios por ver a Dios. Se nos presenta ante el palio de su Madre hasta que lo bajan a nuestra altura hasta el inicio de ese pequeño pasillo eterno que lo separa de su paso. Meditación leída y nuestro coro y Él empieza a andar y a remover conciencias y pellizcos. Se acerca lento pero firme. Dios huele a barrio humilde pero eternamente agradecido. Notas el silencio de las respiraciones entrecortadas por el llanto de más de uno y una. Avanza Dios ahora sujetado por Raúl que a pesar de estar acostumbrado al trabajo de priostía los nervios le llegan donde nos llegó a los que alguna vez nos hicimos Genovevos.  Está el pasillo oscuro, sólo iluminado por velas y donde se encuentra el paso si hay más luz. Estamos entre la noche y el día y en estas aparece Enrique, para acercarlo un poco más al paso. Suena el coro " no tengo más que decir que te amo" entonan y mi Lola convierte sus lágrimas en devoción al Dios de avenidas y sueños. Llega a su paso muchas manos abajo para dejar al Señor en manos de Bandera y Vélez que lo aseguran ya encima de donde volverá a reinar para los que vemos en Él al Padre celestial. Última potencia puesta y con la salve a su Madre se acaba otra noche mágica en el barrio más barrio junto con mi Cerro del Águila. Hoy puedo decir que he visto a mi Dios andar entre los hombres y ahora que acaba el miércoles.  Alberto espera estas letras para actualizar la web antes de las 12. Señor sabes que no soy de pedir, pero cuida de los míos, te veo el lunes. Gracias siempre Señor.

#YaEstáElCautivoEnelPaso

Foto: Antonio Sánchez Carrasco.