Malestar en la Hermandad del Calvario

Arte Sacro. Según ha podido conocer esta portal cofradiero, los últimos tiempos de la junta de la Hermandad del Calvario que preside Ignacio Camacho, ya que las elecciones para una nueva deben celebrarse dentro de dos meses, están resultando especialmente ingratos.

A la conmoción sufrida por el robo del Niño Jesús del taller montañesino, que presidía el altar de la capilla de la iglesia de La Magdalena, donde se hayan los Titulares, que los responsables de la corporación no acertaron a proteger debidamente, se suma ahora una serie encadenada de hechos puntuales pródigos en desasosiego.

En cabeza de todos figura la postura partidista de Camacho, instando a improvisar una candidatura que compita con la única gestada hasta el momento y en la que figure como teniente hermano mayor Javier Muela, invitado por él mismo con anterioridad a encabezarla y desistiendo de ello, por propia decisión personal de Muela, probablemente temiendo al previsible rechazo que provocaría su determinación entre sectores muy caracterizados de los antiguos hermanos.

Esta falta de imparcialidad resulta incomprensible ya que quien preside la posible nueva junta, ya organizada y en promoción previa, es José Luis Chico, el secretario segundo de la junta actual y en ella aparecen nombres prestigiosos, de indudable filiación calvarista, muchos de los cuales fueron elegidos por Ignacio Camacho y han venido trabajando con él en la junta que acaba ahora su mandato.

A esta escisión, provocada desde el poder, llamando a rebato a los hermanos históricos acudiendo a argumentos inciertos tramados para provocar alarma o tan endebles como la antigüedad en la hermandad del candidato, ocho años, en tanto que las nuevas Reglas los limita a cinco como necesarios para poderse presentar, se añade ahora la torpeza en la reclamación por conducto postal a la Hermandad de la Macarena, sin haber agotado la vía de la conciliación verbal, en torno a los retrasos habidos en la última Madrugada.

Esto ha causado estupor no sólo en la Asamblea de hermanos mayores y diputados mayores de gobierno donde la carta, tras haberla enviado poco antes a su destinataria, fue leída, a petición del Calvario, sino en las mismas filas de la Cofradía en las que causa extrañeza ese proceder tan frío de sus rectores que viene a sumarse lamentablemente a sus últimos desaciertos.

Foto: Francisco Santiago.