Avance. La Pastora de Triana ya esta en la Catedral para presidir el Pregón de las Glorias esta tarde (ampliada)

Daniel García Acevedo. A las 14,00 horas hacía su entrada por la puerta de los Palos de la S.I. Catedral el paso de la Divina Pastora que desde su parroquia de Santa Ana ha venido al centro de Sevilla para presidir el pregón de las hermandades de Gloria que pronunciará a partir de las 21,00 horas la periodista y compañera Irene Gallardo Flores.

A las 10,00 horas se ponía en marcha el cortejo con una salva de cohetes anunciando la llegada de la Stma. Virgen a la Plazuela de Santa Ana.

El cortejo estaba formado por la Cruz parroquial con dos ciriales, hermanos con cirios, representaciones con estandarte y varas de las hermandades del Rosario de Mairena, Pasión y Muerte, Juncal, Todos los Santos, Pastora de Capuchinos, Pastora de San Antonio, Madre de Dios del Rosario y Esperanza de Triana.

Tras ellos los hermanos mayores de estas hermandades y de otras como el Rosario de los Humeros.

Momentos destacados del recorrido fueron el paso por la Capillita del Carmen, el Puente de Triana, la recepción por parte de las hermandades de Montserrat, sacramental del Sagrario y Amparo y Carmen del Santo Ángel. Hubo una petalada frente a la capillita de San José en la calle Sierpes.

Como curiosidad debemos de destacar que detrás del árbol que figura en el paso se encontraban una corona y un cetro, ya que la hermandad ha querido destacar la realeza de María. Esta corona ha sido prestada por la Virgen de los Desamparados de Santa Ana que pertenecía a una extinta hermandad que procesionaba el Miércoles Santo junto con el Crucificado que también se encuentra en la real parroquia de Santa Ana y que recibe la advocación de Socorro.

La Titular estrenaba el encaje del manto, los faldones, un broche con la Giralda donado por el Grupo Joven de la Hermandad de La Estrella, la restauración del cayado y la pellica en piel de borrego, donada por Manuel Carlos Hernández, Delegado de Glorias del Consejo de Cofradías. 

 

Fotos: Francisco Santiago.