Andalucía logra en 2008 el mayor número de donaciones de órganos y trasplantes realizados en un año
Las donaciones realizadas en 2008 se han incrementado un 13% respecto a 2007, pasando de 245 donaciones de órganos en 2007 a las 278 recibidas el pasado año. Igualmente, el incremento en los trasplantes se sitúa en un 6%, de forma que se ha aumentado de los 595 trasplantes realizados en 2007 a los 635 en el último año. A estos trasplantes de órganos hay que sumar también la realización por parte de los equipos trasplantadores de los hospitales públicos andaluces de más de un millar de trasplantes de diferentes tejidos.
Estos datos consolidan los excelentes resultados que se vienen alcanzando en los últimos años en materia de donación y trasplante de órganos en Andalucía. Además, en el caso de los trasplantes hepáticos, durante 2008 se han conseguido las cifras más elevadas registradas hasta el momento con la realización de 187 trasplantes de este tipo frente a los 175 conseguidos en 2007.
En concreto, de los 635 trasplantes realizados en 2008 (34 de ellos infantiles), 367 fueron de riñón (19 infantiles), 187 de hígado (10 infantiles), 35 de corazón (dos infantiles), 23 de pulmón (tres infantiles) y 23 de páncreas.
Por hospitales, el hospital Reina Sofía de Córdoba llevó a cabo 135 trasplantes (36 de riñón, 52 de hígado, 16 de corazón, 23 de pulmón y 8 de páncreas). En Sevilla, el equipo trasplantador del hospital Virgen del Rocío realizó 182 trasplantes (106 de riñón, 57 de hígado y 19 de corazón).
Por su parte, el hospital Carlos Haya de Málaga trasplantó 108 riñones, 52 hígados y 15 de páncreas, 175 en total. El hospital Virgen de las Nieves de Granada realizó 87 trasplantes (61 de riñón y 26 de hígado). Por último, el hospital Puerta del Mar de Cádiz llevó a cabo 56 trasplantes de riñón.
Perfil del donante
En cuanto a la causa de fallecimiento de los donantes, es necesario destacar que continúan disminuyendo los donantes de órganos y tejidos fallecidos a causa de accidentes de tráfico, de forma que se ha producido un descenso del 57% en los dos últimos años, pasando de 58 donantes en el año 2006 a los 25 producidos en 2008. Estas circunstancias se deben fundamentalmente a la estrategia de concienciación desarrollada por la Dirección General de Tráfico, a la mejora de la infraestructura de las carreteras y a la, cada vez mayor, prudencia de los conductores. Para la Coordinación Autonómica de Trasplantes del Servicio Andaluz de Salud (SAS), “es un hecho por el que toda la sociedad debe congratularse”.
A pesar de esta disminución de donantes fallecidos por accidente de tráfico, la cifra de donantes se ha visto compensada por la detección y obtención de órganos por parte de donantes fallecidos por otras causas, especialmente personas de edad que mueren a consecuencia de un accidente cerebral hemorrágico.
Desde la creación de la Coordinación Autonómica de Trasplantes de Andalucía, en 1991, la tasa de donantes fallecidos por millón de población de la comunidad andaluza ha evolucionado al alza. De hecho, en 1991, la tasa de donación era de 13,6 donantes por millón de población, por debajo de la media española (20,7) y europea (15) y, a pesar de la disminución de la siniestralidad vial de los últimos años, se ha conseguido alcanzar una tasa de 33,9 donantes por millón de población. Estas cifras sitúan a la comunidad andaluza en niveles similares a la media nacional y por encima del resto de países desarrollados, ya que la media actual de la Unión Europea es de 18 donantes por millón de población y la de Estados Unidos es de 26.
Obviamente, el significativo aumento en la donación en los últimos años se traduce en el correspondiente incremento de los trasplantes. De esta forma, mientras que en 1991 se realizaron 288 trasplantes de órganos, en 1995 se llevaron a cabo 383, en 2000 se practicaron 491, en 2005 se produjeron 578 y en 2008 se alcanzaron 635, lo que significa un incremento sostenido.
El aumento registrado en los trasplantes de órganos sólidos se ha experimentado también en los implantes de los distintos tejidos.
El perfil del donante de órganos fallecido presenta cada vez mayor edad y continúa modificándose de forma progresiva. La edad media ha pasado de 35 años en 1991 a casi 56 años en el pasado 2008, si bien no existe límite de edad para ser donante fallecido de órganos. De hecho, un 23 por ciento de los donantes de 2008 tenían más de 70 años y, de éstos, se produjeron cuatro donaciones de personas con más de 80 años.
El aumento de la edad media del donante supone una disminución en la media de órganos válidos para trasplante por donante, lo que imposibilita que el importante incremento de las tasas de donación de los últimos años se refleje, de forma proporcional, en un aumento similar de las tasas de trasplante. En cuanto al género de los donantes, en tres de cada cinco donaciones el donante era un hombre.
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