Provincia. Cuando todo un barrio se va de Romería con su Virgen, crónica de la XXVII Romería de Montequinto

Eduardo Fdez. López. Un año más y ya van veintisiete la Virgen de los Ángeles, patrona de Montequinto volvió a reunir a todos sus fieles durante los actos y cultos que se celebran en torno a su Romería.

El sábado 8 se celebró la exaltación romera, el lunes 9 se recitaron poesías escritas para ella y el martes los coros del barrio le dedicaron varias canciones, terminando todos ellos unidos cantando la Salve de la Virgen.

Durante miércoles, jueves y viernes se celebró el solemne triduo.

Ya en la jornada del sábado, a las nueve de la mañana, se trasladó el Simpecado en rosario matutino desde la parroquia hasta la Ermita La Alegría.

Por la tarde, a las ocho, dio comienzo la solemne función principal en la que participó el coro romero, estrenando varias canciones, y en la que se entregaron también como cada año los ángeles a personas destacadas y relacionadas con la vida de la parroquia y de la Virgen, entre ellos uno fue para el amigo y gran fotógrafo Francisco Javier Muñoz Mediano, con varios año ya fotografiando todo lo que ocurre en torno a la parroquia.

Al finalizar, se realizó la tradicional ofrenda de flores a la Virgen y el besamanos. Este año también tuvo la Virgen la visita de los jóvenes de la Cruz de Mayo de Ntra. Sra. del Pilar.

Comenzaba el domingo y con él el día grande del barrio, este año con la ausencia de los cohetes la Virgen salía pasados algunos minutos de las nueve de la mañana y era colocada en su carreta para emprender el camino que le llevaría hasta los P.P. Escolapios, la Cruz Blanca y el Cortijo de Quinto, donde se celebró la Misa de Romeros.

Al finalizar y camino ya de su ermita la Virgen de los Ángeles visitó nuevamente a los Hermanos Franciscanos de la Cruz Blanca, a pesar de todas las noticias surgidas días antes la visita fue tan emotiva como otros años.

Eran las una y cuarto de la tarde cuando la Virgen entraba en su ermita y comenzaba el Ángelus, de ahí hasta las siete de la tarde numerosas visitas y numerosos cantes y bailes, que amenizaron la estancia de la Virgen hasta que a las seis y media comenzase el Santo Rosario previo al inicio del regreso de la Virgen.

Con más retraso que otros años la Virgen llegaba al barrio, numerosas paradas durante su transitar con cantes y bailes que como suele ser tradición, y sana tradición, impedían que la Virgen llegara hasta la parroquia.

Al llegar a ella un momento muy emotivo, y es que al celebrarse este año el XXV Aniversario del Cristo de la Esperanza, la Asociación Parroquial de la Virgen ha tenido el detalle de colocar frente a su capilla una imagen de la Inmaculada Milagrosa, bendecida el sábado por la tarde por el párroco Francisco José Blanca Castán y que de manera extraordinaria fue visitada por la Virgen de los Ángeles, que ya en sus andas y antes de entrar en el templo quiso saludarla a ella y al Cristo, dejándonos un momento inédito y emotivo para el recuerdo.

Finalizaba cuando ya comenzaba a caer la noche la tradicional Romería de Montequinto, antesala también de la partida hoy de la Hermandad del Rocío hacia la Blanca Paloma.

Y ya que hablamos de Hermandades de Montequinto, reseñar que la Virgen de los Ángeles llevaba en su saya la medalla de oro de la futura Hermandad de Penitencia del barrio, la del Cristo de la Humildad en Getsemaní, Nuestra Señora del Pilar en su Mayor Dolor y Santiago Apóstol, apoyando así el crecimiento de esta todavía pre-asociación parroquial.

Les mostramos a continuación varias fotografías de todo lo comentado a modo de resumen, en los próximos días podrán ver varias galerías de todos estos cultos y actos.

Fotos: Eduardo Fdez. López