Diferencias entre “tu casa” y “la mía”. Cocofrade (episodio 5)

Hola amiguitos cofrades, hace ya más de un año que no tengo el gusto de compartir mis consejos con vosotros y, debido a varios casos de los que he podido enterarme últimamente, creo oportuno realizar un episodio sobre la diferencia entre “tu casa” y “la mía”.

Por ejemplo, cuando haces una foto en “tu casa”, y me refiero dentro (ya os explicaré la diferencia entre dentro y fuera otro día), tú y únicamente tú eres el responsable si esa foto se llega a hacer pública.

Igualmente, Si alguien va a “tu casa” y permites que algo de tu propiedad (o de otro) que está “dentro de tú casa” sea fotografiado con el móvil, el único culpable eres tú, que has permitido que ese hecho ocurra dentro de “tu casa” y tendrás que acarrear las consecuencias futuras.

Igualmente, si en tu taller (que es tu otra casa) entra un amiguete o un cliente y hace una foto con su móvil a un trabajo que estas realizando, eres tú el que tendrías que haber tomado las precauciones necesarias para que en “tu casa” no esté visible lo que no se puede mostrar a todo el que a ella entra.

Que hay batidos caducados (mala leche) en el mundillo de las cofradías, por supuesto, nadie lo duda. Pero que lo que yo pueda fotografiar en “mi casa” es problema mío y lo que otros fotografían en “tu casa”, es problema tuyo. Y esta regla de dos (“tu casa” y “la mía”) es totalmente comprensible en cualquier parte del mundo, incluida nuestra rancia y traicionera Sevilla.

Bueno amiguitos, me tengo que despedir, espero tardar en ofreceros una sexta entrega de este, vuestro superhéroe “Cocofrade”. Ah, se me olvidaba, no dejeis de comprar lo último de Jirones de Azul "¡¡A la Gloria, capillitas!!" (Viñetas cofrades de Javier García).