La Virgen del Rosario de Monte-Sión visitó a su Hijo de La Salud de Los Gitanos

Francisco Santiago. Un año más se cumplió el rito y, como cada primero de noviembre, la Dolorosa de la calle Feria con la Advocación del Rosario dejó su Capilla y se traslado en Rosario de la Aurora para honrar a Todos los Santos.

En esta ocasión era una visita muy deseada por ambas partes, pues ambas hermandades son de barrio, del centro y señeras, tanto la de Monte-Sión como la de Los Gitanos.

Así cumpliendo los horarios establecidos, sobre las 08:00 horas la comitiva llegaba a las inmediaciones del Santuario, concluyéndose así el rezo mariano, que en esta ocasión estuvo dirigido por el joven sacerdote y coadjutor de la Concepción Inmaculada, Antonio Romero Padilla, que igualmente presidió la misa conjunta.

Destacaba sobremanera la vestimenta que se había elegido para esta ocasión, compuesta de la saya morada y blanca, que tiene la Virgen del Rosario desde hace 20 años gracias a la  donación de un diestro y el manto que estrenaba a juego con la misma, en tonalidad morada para, igualmente, homenajear a la Corporación de la Madrugá y que ha sido donado y confeccionado por un grupo de hermanos.

Los ritmos de los campanilleros "Amigos de la Navidad" pusieron el broche de oro a la celebración en un día tan especial como es este 1 de noviembre, festividad de "Todos los Santos".

Fotos: Francisco Santiago/Juan Alberto García Acevedo.