Alcosa vivió ayer un día grande con su procesión extraordinaria

Arte Sacro. El barrio de Alcosa vivió ayer, día 15 de junio, un día grande, con la celebración de la procesión extraordinaria que se celebró con motivo del cincuentenario de la erección canónica de la parroquia de Nuestra Señora de los Desamparados.

En esta procesión, cuyos tres pasos salieron de la iglesia de la Beata Ana María Javouhey, sede de la hermandad del Divino Perdón, culminando en la parroquia de los Desamparados, participaron las imágenes de San Francisco de Asís, que procesionó en un paso de caoba y plata, donde antiguamente salía la Virgen del Rosario de la calle Santas Patronas, e iba portado por los jóvenes de la parroquia y acompañado musicalmente por la banda de cornetas y tambores Pasión y Resurrección de este barrio.

Tras el santo, en el paso del Señor de la Humildad de Mairena del Alcor, procesionaron Nuestro Padre Jesús del Divino Perdón junto a María Santísima de la Purísima Concepción, vestidos para la ocasión por el vestidor de la hermandad, José Antonio Grande de León, acompañados musicalmente por la agrupación musical Virgen de los Reyes.

Cerrando el cortejo de pasos, Ntra. Sra. de los Desamparados lució por primera vez en paso de palio, con los sones musicales de la banda municipal de la Puebla del Río tras la Virgen.

Ntro. Padre Jesús del Divino Perdón portó túnica de Ntro. Padre Jesús de la Divina Misericordia, titular de la hermandad de las Siete Palabras, que se confeccionó en el taller de Fernández y Enríquez en el año 2005 y un cíngulo perteneciente a Ntro. Padre Jesús del Gran Poder. Por su parte, María Stma. de la Purísima Concepción lució manto bordado, cedido por la hermandad de la Estrella y también realizado por  Fernández y Enríquez, saya burdeos realizada por el antiguo taller de bordados de esta hermandad, fajín de hebrea y, sobre este, estrenó cinturilla bordada.

El exorno floral del paso del Divino Perdón creado por Miguel Murillo, estuvo compuesto por anturium rojos, rosas rojas, jacintos salmón, claveles púrpura, cymbidium burdeos, astromelia roja y delphinium morado.

Ntra. Sra. de los Desamparados realizó, como hemos dicho, su procesión en el paso de palio que estuvo compuesto de respiraderos, faldones, y Virgen de los Desamparados en la entrecalle, todo perteneciente a enseres própios.

Parihuela de la hermandad del Divino Perdón. Peana de la hermandad de los Dolores de Torreblanca. Llamador de la hermandad de la Exaltación. Ángeles cerifarios de la hermandad de los Dolores del Cerro. Varales, bambalinas y techo de palio de la hermandad de los Javieres. Candelabros de cola de la hermandad de Padre Pío.

La Santísima Virgen lució ataviada por su vestidor, José Carlos Hernández, portando la corona de la hermandad de la Milagrosa. Tocado de tul bordado en oro y lentejuelas, sobre seda natural cruda, puños y pañuelo de aplicación de Bruselas y saya torera, de la Hermandad de San Esteban. Y el manto, que fue cedido por la hermandad de San Benito.

El exorno floral de palio de la Virgen de los Desamparados, realizado también por Miguel Murillo, estuvo compuesto por rosas quicksand, hortensias preservadas malva, nardos, pittosporino y esparragueras oro y lino.

En el cortejo acompañaron diversas representaciones de las hermandades que han cedido sus enseres y otras vinculadas con ambas corporaciones, y en las presidencias de los pasos, fray Gonzalo Fernández-Gallardo Jiménez, párroco y director espiritual de la hermandad de los Desamparados, su hermano mayor, Miguel Martínez García, el del Divino Perdón, José Luis Pulido, el tte. de alcalde del Área de Seguridad Ciudadana, Movilidad y Recursos Humanos y Distrito Este-Alcosa-Torreblanca, Ignacio Flores y Antonio Rodríguez, delegado de glorias del Consejo de Cofradías.

Fotos: Juan Alberto García Acevedo.