Almuzara publica el thriller Los hijos del Justo, de Fran Ortega: ¿Quién ha robado la Esperanza Macarena?

Arte Sacro. Ochenta y seis capítulos conforman Los hijos del Justo, de Fran Ortega, que publica Almuzara. Un thriller que fantasea con una idea que, quién sabe, podría hacerse realidad. La historia arranca un domingo, tres semanas antes del Domingo de Ramos. En plena noche, suena la alarma de la basílica que alberga la imagen de Nuestra Señora de la Esperanza Macarena. El capellán, Antonio, se despierta sobresaltado. Quizá no sea nada, un roedor que haya puesto en jaque, una vez más, el sistema de seguridad. Sin embargo, esta vez no será así. La imagen de la virgen no está. La han robado. Parece imposible, pero es cierto.  «El que haya perpetrado ese golpe no sabe el daño que ha hecho, pero es que ni se imagina el que va a hacer», piensa para sí Antonio mientras respira hondo, tratando de calmar la congoja que le tiene el corazón en un puño (...)”, escribe el autor. Lo que no sabe este hombre, es cuál será su trágico destino pocos minutos después de haber descubierto el robo.

A partir de ese momento la acción no deja de sucederse. ¿Cómo es posible que la imagen que procesiona la Madrugá del Jueves Santo haya desapercibido de su camarín? ¿Quién puede habérsela llevado? El inspector de Policía Lorenzo Millán, licenciado en Historia y con un máster en Historia del Arte (que no es un dato baladí), es el encargado de llevar el caso, “un marrón de órdago”, como él mismo dice. Narra en primera persona. Es un hombre roto. La vida le arrebató a su compañera hace unos años. De repente.

Encontrar a la Macarena antes de que estalle el caos en Sevilla es una misión contrarreloj. Y resolver la muerte del capellán, el pobre y abnegado Antonio, parece a priori una misión complicada. Lo que parecía un robo sacro se convierte en una oscura trama donde las creencias, el fanatismo y una hermandad secreta se entrelazan en un peligroso juego. ¿Por qué se han producido tantos desmayos y al mismo tiempo en la basílica? ¿Cómo es posible que Eulalia Fuentes, una de las desmayadas de ese aciago domingo, dice que vio al demonio? ¿Fue su imaginación o hay algo más? ¿Quiénes son los hijos del Justo? ¿Por qué visten con saya larga y capucha? ¿Se han llevado ellos la imagen de la Esperanza Macarena? ¿Por qué nadie ha visto ni escuchado nada aquel domingo?

Los capítulos, cortos, a veces, casi una ráfaga, hacen que la acción se suceda a ritmo de vértigo. No hay tiempo que perder, y el inspector Millán, un hombre curtido, taquero, y con una experiencia ancha en la vida, está dispuesto a llegar hasta el final.

Fran Ortega nació en Sevilla el Lunes de Resaca de 1990. Criado en pleno barrio de Nervión y bético de cuna, tuvo su primer carné de socio antes incluso de dejar el chupete. Desde niño mostró un profundo interés por las tradiciones de su tierra, especialmente por la Semana Santa, una pasión que le inculcó su abuelo y que lo llevó, con solo siete años, a hacerse hermano de la Hermandad de San Bernardo, a la que ya pertenecían varios miembros de su familia y en cuya iglesia contrajeron matrimonio sus padres.

Durante la adolescencia, su curiosidad por la comunicación y el arte lo llevó a explorar el cine, la música y el periodismo, haciendo sus primeras incursiones en cada uno de estos ámbitos. Ha sido locutor en la emisora local sevillana Neo FM, donde consolidó su experiencia radiofónica. Con formación en Derecho, actualmente trabaja como Marketing & Content Executive en una multinacional, compaginando su faceta profesional con su amor por la comunicación y la cultura de su ciudad.