Provincia. La Virgen de Valme reestrena coronas

Hdad. de Valme. Con motivo de la festividad de la Candelaria y coincidiendo con el tradicional acto de presentación de niños y niñas, la Santísima Virgen de Valme ha vuelto a lucir las coronas de plata sobredorada que son réplicas de las de su Coronación Canónica y que han sido restauradas en el taller de Orfebrería Marmolejo.

Ha de recordarse que estas coronas fueron realizadas por el insigne orfebre Fernando Marmolejo Camargo, reproduciendo las que él mismo ejecutó en oro para la Coronación. Habitualmente, han venido siendo utilizadas en el camarín y para cultos internos.

El trabajo de restauración ha consistido en el soldado y refuerzo de piezas sueltas, enderezado del canasto, adaptación de los imperiales de la corona de la Virgen para que sean desmontables, y pulido, abrillantado y chapado en oro de ambas preseas.

Asimismo, se ha enriquecido la decoración, con nueva pedrería, perlas y motivos heráldicos, siguiendo en lo posible el estado en que se encontraban estas coronas antes del robo y los desperfectos que sufrieron en octubre de 1984.

 Además, la corona de la Virgen se ha completado con la paloma del Espíritu Santo –que remata el resplandor de la cruz– y cuatro escudos realizados en esmalte a color, que corresponden a personalidades eclesiásticas relacionadas con la historia de Santa María de Valme: en el frontal, el escudo de San Juan Pablo II (por ser el pontífice que dio el título de Nuestra Señora de Valme a la Parroquia romana de Villa Bonelli, y el único Papa que hasta ahora ha visitado Dos Hermanas); en la trasera, el escudo de León XIII (bajo cuyo reinado se concedió a la Hermandad el título de Pontificia, así como la agregación a la Basílica de Santa María la Mayor); en los laterales, el escudo del Beato Marcelo Spínola (que aprobó el nombramiento de la Virgen como Protectora de Dos Hermanas en 1897), y el del cardenal José María Bueno Monreal (por ser el prelado de la Archidiócesis hispalense que solicitó y obtuvo del Vaticano la Coronación Canónica de Nuestra Señora de Valme, oficiando aquella memorable ceremonia el 23 de junio de 1973).

A partir de hoy, y como viene siendo habitual desde hace 12 años, la venerada imagen estará un tiempo sin el manto, pudiendo ser contemplada por todos los fieles y devotos en su talla original durante las próximas semanas.