Provincia. Santa María de Escardiel llegó a Castilblanco de los Arroyos en una histórica Venida

Manuel Pinto Montero. “Cuando pasen cinco años quién te volverá a ti a ver Virgen de Escardiel”.  De este modo iniciaba la crónica hace cinco años cuando la Virgen de Escardiel regresaba a su blanca Ermita tras permanecer unas semanas en su pueblo de Castilblanco de los Arroyos. Un lustro después se volvía a repetir la historia, esta vez de una manera más especial y es que el calor del mes de agosto se cambió por una primaveral tarde del mes de mayo. Este era el año de la Venida de la Virgen de Escardiel pero el párroco de Castilblanco, don Pablo Colón, pidió a los hermanos de la Santísima Virgen de Escardiel que la Virgen estuviese más tiempo en el pueblo y que esas semanas que permanecía durante los meses de agosto y septiembre se volviesen más largas con una Venida en el mes de mayo. De este modo la Hermandad ha preparado esta histórica y extraordinaria Venida en la tarde del sábado 6 de mayo. Tarde en la que el sol se reflejaba en la blanca Ermita de la Sierra cuando la Santísima Virgen de Escardiel abandonaba su casa tras el rezo del Santo Rosario.

La bella imagen de Santa María de Escardiel es una talla de la denominada “fernandinas”, imagen gótica realizada en 1247 cuando las tropas cristianas se dirigían a Sevilla. En su honor se levantó una Ermita en la zona denominada “fasthcardiel”, donde hoy se sigue venerando.

Faltaban unos diez minutos para las seis de la tarde cuando la Virgen atravesó el dintel de su Ermita y contemplaba en un mes de mayo los aledaños de su blanca morada. Esta salida de la Ermita en esta histórica Venida también tenía momentos especiales es que por primera vez la Virgen no abandonaba su Ermita con el rostro cubierto sino que fue cubierta bajo la encina que frente a su Ermita se encuentra. De este modo numerosos fieles y devotos pudieron contemplar ese momento en el que su camarera y su vestidor cubren a la Santísima Virgen para protegerla del largo camino hasta Castilblanco de los Arroyos. Poco a poco la iban cubriendo con mimo y dulzura. Faltaban cinco minutos para las seis cuando el pañuelo cubrió su rostro entre vivas y ovaciones. Se iniciaba un largo camino hasta su pueblo a hombros de numerosos hombres y mujeres que quisieron portarla en una calurosa tarde del mes de mayo.

No faltaron hombros para portarla durante este largo camino ni vivas ni oraciones a la Santísima Virgen junto a rezos por sevillanas en cada una de sus paradas. Momento especial se vive ante una de las encinas del camino a la que llaman “la encina de la Virgen” donde se reza y se canta a la Santísima Virgen de Escardiel.

Fueron numerosos los fieles que la acompañaron en este camino pero muchos más los que la esperaban a la entrada del pueblo dónde los cohetes anunciaban su pronta llegada. Alrededor de las ocho y media de la tarde la Virgen miraba hacia su pueblo viendo sus blancas casas sintiéndose mucho más cerca. Sobre las nueve abandonaba el camino y ya por fin llegaba a Castilblanco de los Arroyos buscando el Mesón del Agua. Este rincón tiene la fortuna de contemplar, en cada una de sus Venidas, como le quitan el pañuelo de su rostro o como la volverán a cubrir de nuevo el próximo mes de septiembre. En un pequeño altar montado para la ocasión de nuevo su camarera y su vestidor despojaron a la Virgen de esa protección del camino. A las nueve y media la Virgen volvió a contemplar a sus numerosos fieles en el histórico Mesón del Agua donde la emoción, las lágrimas y los sentimientos afloraron junto a las oraciones a la Santísima Virgen de Escardiel que tras cinco años regresaba a su pueblo de Castilblanco de los Arroyos.

Y de nuevo los castiblanqueños volvieron a portar las andas de la señora para pasear por las calles de su pueblo buscando la Parroquia del Divino Salvador donde descansará durante estos meses hasta su nueva romería en el mes de septiembre. La Virgen visitaba a los vecinos de la calle Blas Infante entre emociones y lágrimas de los presentes que de nuevo la contemplaban con sus galas de Pastora, en esta ocasión con el terno rojo bordado y con su sombrero sobre sus sienes. El divino Pastorcito de Escardiel lucía sus sajones.

El sonido del tamboril se mezclaba con los vivas y oraciones de los numerosos vecinos que la esperaban. La Virgen visitó el Altillo parando en cada una de sus casas y bajando para que aquellas personas mayores la pudiesen contemplar más cerca aún. Paseó por numerosos rincones de Castilblanco hasta llegar al barrio del Puente donde sus vecinos de manera especial la esperan en cada una de sus Venidas. En este enclave se rezó cantando a la Santísima Virgen con su coro y con los numerosos fieles que junto a ella se encontraban en ese momento. Poco a poco la Virgen recorrió las calles de su pueblo buscando la Parroquia del Divino Salvador donde descansa durante estos meses y donde recibe las visitas, oraciones y peticiones de su pueblo de Castilblanco de los Arroyos que vivirá un tiempo de gracia con la presencia de la Santísima Virgen.

Santa María de Escardiel volverá a las calles de Castilblanco de los Arroyos el próximo mes de agosto cuando visite distintas calles de la localidad y de manera especial en la noche del 15 de agosto donde procesionará bajo su característico palio de tumbilla. Y de nuevo con la llegada del mes de septiembre la Santísima Virgen regresará a su Ermita con sus ganas de Pastora cubriendo su bello rostro en el Mesón del Agua viviendo una nueva Romería llena de fe y devoción mariana en este bello pueblo de Castilblanco de los Arroyos.

 CAMINO DE CASTILBLANCO DE LOS ARROYOS

EN CASTILBLANCO DE LOS ARROYOS

Fotos: Manuel Pinto Montero.