Cómo hacer realidad una calle para el “Escultor Antonio Illanes”. Luís Chamorro García

Sevilla ha tardado, es cierto. Sevilla muchas veces olvida, también es cierto. Pero unos pocos sevillanos, nos hemos puesto manos a la obra para conseguir que el personaje obtenga el sitio de justo reconocimiento en el nomenclátor de su ciudad. Antonio Illanes Rodríguez exportó nuestra idiosincrasia allá donde el destino de las bellas artes lo dirigieron, rezumó sevillanía en todo los lugares que habitó, apoyó a los necesitados de su tierra y se apoyó en la aristocracia de su ciudad para conseguir la repercusión necesaria que todo creador demanda. Este gran artista ya dispone de ese espacio que las ciudades destinan a sus significados hijos y que, en el caso que nos ocupa había sobradamente justificado y demostrado en vida. Por ello se antojaba injusto el que más de cuarenta años después de su fallecimiento aún no se hubiese rotulado con su nombre una de las calles de su ciudad.

El prolífico artista profano es ya poco conocido, el hombre bueno, generoso y cordial es ya poco recordado, el ciudadano ejemplar, partícipe, activo y comprometido con su Sevilla y sus gentes ya no resuena entre sus vecinos. Sin embargo, el cofrade, artista imaginero, sigue siendo un referente dentro de la población capillita. El reconocimiento por los Titulares de varias Cofradías sevillanas y el orgullo de sus hermanos por el artífice de sus devociones está hoy día en vigor y con tanta fuerza que casi podríamos dar en llamar que gracias a eso hoy es reconocido. Como siempre, a pesar de dar muchos motivos para lo contrario, lo cofrade es quien marca los tiempos en esta ciudad.

Hace ya años que tuve el placer de conocer al hijo y a la nieta de quien creó la portentosa talla de mi devoción. Me abrieron las puertas de su casa y me sentí agasajado por la bondad de una familia que sentía la herida del olvido. Allí me comprometí para movilizarme y conseguir curar tan incómoda omisión.

Hace dos años que se cumplían 75 de la creación del que hoy todos conocen como Santísimo Cristo de las Aguas y pacté con el entonces hermano mayor de mi querida Hermandad de las Aguas, Antonio Arrondo Pazos, con el mayor devoto y conocedor de la vida y de la obra del escultor, Sergio Jesús Parra Medina, y con el hijo del artista, Antonio Illanes Salcedo, presentar en el Registro del Excelentísimo Ayuntamiento de Sevilla, la solicitud formal para que se hiciese realidad lo que todos entendíamos de justicia: Una calle rotulada con el nombre de “Escultor Antonio Illanes”.

Aprovechamos y reactivamos una iniciativa que el querido hermano de la Paz Alejandro Arboleda Montes había dispuesto en Facebook. Abrimos una petición al Ayuntamiento desde Change.org. Solicitamos, por medio de correspondencia dirigida desde la Hermandad de las Aguas, a la Real Academia Sevillana de Bellas Artes Santa Isabel de Hungría de la que fue Académico, a las Cofradías de Sevilla donde sus imágenes son Titulares y a la Tertulia Literaria Noches del Baratillo de la que fue mantenedor, que se adscribieran a dicha solicitud. Gracias a todos por el apoyo recibido.

Esta iniciativa recibió el respaldo y el beneplácito del Concejal de Seguridad, Movilidad y Fiestas Mayores del Ayuntamiento de Sevilla Juan Carlos Cabrera Valera y todo su equipo en las dos reuniones que se mantuvieron con él. La familia optaba porque fuera la barreduela “Teide”, frente a la casa del artista en la calle Antonio Susillo, al que se le cambiara el nombre. El Ayuntamiento nos instó, coherentemente, a que fueran los vecinos los que mostraran su apoyo por escrito al cambio de rotulación. Esto no ha podido llevarse a cabo dado que las consultas que se han realizado siempre han recibido la negativa de los vecinos.

Será el destino, será la fortuna, será porque así debía de ser, que algunas buenas personas promulgaron en el punto 16 de la Sesión, en el Orden del Día del Pleno del Excelentísimo Ayuntamiento de Sevilla de ayer 29 de Junio de 2018, y en el año en que se cumple el 75 aniversario de la Bendición del Santísimo Cristo de las Aguas, para que se aprobase rotular una calle dedicada a tan insigne artista. Por total unanimidad los vecinos de nuestra ciudad representados en este pleno dieron por concluida una historia que devuelve la Paz a una familia todo corazón, que después de sentir Tristeza por la Lanzada del olvido han conseguido resarcir su Pena con una Victoria justa que como agua fresca ahora se desliza alegre por la conciencia de nuestra Sevilla.

Fotos: Juan Alberto García Acevedo.