Y llegó la Esperanza... Antonio Sánchez Carrasco

... Llegó dentro de la pandemia, de las muertes, del dolor de no poder abrazar, de la distancia sideral de no poder comerme a besos a mis padres, del tener que dar con el codo cuando antes dabas un abrazo..., dentro de todo llegó la Esperanza. Llegó ese viento fresco y verde que llena las vidas de ilusión por vivir.

Nada nos quita el dolor de los ausentes y de los que han sufrido la enfermedad, pero nuestras almas buscan ese clavo donde agarrar el corazón para que se tiña de sueños.

Bajaron a nuestra vera las Vírgenes que nos recuerdan que un tiempo mejor es posible y que llegará el día en el que volvamos a sentir felicidad.

En lo personal las gracias a la Junta de la Hermandad de la Esperanza de Triana por dejar que aquel niño del Cerro del Águila que cada año se asomaba a ver a la Virgen en la mañana del Viernes Santo, este año la ha conseguido fotografiar con tranquilidad. Hemos conseguido estar con más de una de las Esperanzas aunque nos han faltado varias.

Arte Sacro ha cumplido años. El medio cofrade que tantos amigos y satisfacciones me ha dado y encima mi amigo Pepe Santos me manda una foto que adjunto a estas letras. Trabajazo el que están haciendo los de blogosur. Pues si de la Esperanza de Málaga es la foto, una de esas imágenes que he tenido la suerte de verla en la calle y a la que ahora echo de menos en la distancia. Del tamaño de su trono es la Esperanza que transmiten las Vírgenes que celebran su día el 18 de diciembre. Esperemos que ese manto verde nos vaya cubriendo poco a poco en 2021 hasta que el virus no sea más que un mal recuerdo. Confiemos en la Esperanza.

Fotos: Pepe Santos.