El Señor de la Sagrada Entrada en Jerusalén pierde momentáneamente el apodo de “La Borriquita”
Francisco Santiago. En estos días los visitantes que acudan al templo del Divino salvador se encontrarán con una imagen peculiar y desconocida, al Señor de la Sagrada Entrada sentado sin su peculiar y característica montura.
Y esto es porque la Borriquita del Misterio de la Sagrada Entrada en Jerusalén se está restaurando en el taller de José Rodríguez Rivero-Carrera.
El motivo son unos desperfectos en la pata anterior izquierda detectados en un estudio realizado por termoluminiscencia y con una sonda óptica por la empresa Vorsevi S. A., después de la Semana Santa del 2008.
Este estudio no mostró otras alteraciones estructurales importantes. La policromia de la pollina (la rucha o borriquita pequeña) también va a ser restaurada. Destacar que ambas tallas son de autor desconocido y se piensa son las originales realizadas para el Misterio de la Sagrada Entrada en Jerusalén en el siglo XVIII.
Fotos: Francisco Santiago