No sólo en el ajedrez. Francisco Santiago.

En la ya superada década que llevo comunicando sobre las cofradías de Sevilla, he de reconocer que muchos factores han influido desde aquellos primeros días en que “Torreblanca” no dejaba de ser una pieza más en el ajedrez y poco más. De aquellas primeras visitas que efectuábamos en los albores del siglo XXI a la salida procesional del Sábado de Pasión, la cosa ha cambiado mucho y para mejor.

Hemos aprendido que la religiosidad popular sí que entiende de extramuros y que hay más de una Catedral en esta mariana ciudad de Sevilla. Que los cortejos procesionales tienen mucho que aprender de las vísperas y de su forma de actuar, además de conocer los entresijos, normas y formas de actuar de esta querida Hermandad de los Dolores.

En el tablero del Consejo de Hermandades y Cofradías de Sevilla, parece que algunos no conocen bien las reglas del juego y confunden las normas establecidas para cada momento. Así, cuando interesa, todos somos parte del mismo conjunto, pero en otras ocasiones ese conjunto se convierte en una especia de “puzzle”, donde ciertas piezas no acaban de encajar.

Volviendo al ajedrez, alguno de los participantes sólo ven fichas de color blanco o negro, otros confunden las normas ajedrecísticas con las elaboradas para “la oca” o “las damas”, saltándose fichas o intentando repetir “su tirada”, siguiendo el dicho popular de “de oca a oca y tiro porque me toca”.

El tiempo es experiencia y fuente de conocimiento, por lo cual, ahora sí estamos preparados en nuestro portal “Arte Sacro” para poder hablar con mayúsculas de la Hermandad de los Dolores, conociendo bien sus actos y cultos, sus proyectos sociales y culturales, sus ansias de ser mucho más que una Hermandad de barrio y, lo mejor, dando ejemplo de cómo debe de poner una Hermandad su cortejo en la calle, a pesar de las precariedades impuestas por la propia prensa.

Hay quien ve en las Vísperas sólo a los “peones”, los cuales comienzan el juego el Viernes de Dolores y Sábado de Pasión. Otros prefieren verlas como “alfiles”, moviéndose de forma lateral pero jamás en el sentido recto. Peor lo llevan los que las consideran como “el caballo”, avanzando en línea recta pero siempre encontrando un giro en el camino.

Yo voy más allá aún y con esto quiero advertir a los que quieren jugar de espaldas al tablero. En este popular barrio no sólo hay tendederos y pobreza (que la hay), tampoco es todo inseguridad y malestar social (que lo hay). También hay mucha historia del pasado y ganas de mejorar el presente para consolidar el futuro.

A los jugadores que se valen de los anales históricos, les diremos que fue en el siglo XIII cuando Alfonso X el Sabio  mando realizar el “Libro de los Juegos”, incluyendo en el mismo el ajedrez y que ya en 1484 se dan nociones de la restauración del molino que en este territorio existía.

Igualmente este barrio tiene su Rey y su Reina, monarca Cautivo ante Pilato que se rinde ante la Reina regente, que no es otra que su Madre de los Dolores. ¿De qué valen siglos de historia recogida en conventos extinguidos, clausurados o desamortizados cuando las Reglas que escribieron aquellos primeros cofrades no dejan de ser hoy meros apuntes bibliográficos en sus boletines? ¿De qué vale darse golpes en el pecho rememorando quizás a los flagelantes que dieron orígenes a las cofradías, cuando la fe se pierde entre tiradores de cerveza y “pescaito frito”?

La Hermandad de los Dolores celebra el XV Aniversario Fundacional de la Corporación y el XX aniversario de la llegada a la parroquia de María Santísima de los Dolores. Quizás para gran parte del submundo cofrade esto no tenga más sentido, pero para la religiosidad popular y para los creyentes, el 13 de septiembre será mucho más que todo eso, porque es el triunfo de la palabra de Dios sobre todas las cosas y, al igual que los tiempos de la revolución francesa, donde las palabras “Libertad, igualdad y fraternidad” se hicieron un sitio en la historia, ahora es la Hermandad de Torreblanca la que mueve ficha, para dar “jaque mate” y ganar esta partida para dar sentido a todo un barrio.

¡Que así sea!

Francisco Santiago
director de www.artesacro.org

Nota: Artículo aparecido en el Boletín de septiembre de la Hermandad de los Dolores de Torreblanca