Fragmento del Pregón de 1985. José Luis Peinado Merchante, Pbro.

El Pregón de la Semana Santa de 1985 tuvo lugar el domingo 24 de marzo en el Teatro Lope de Vega, siendo presentado el pregonero por don Manuel Fernández Floranes, Teniente de Alcalde Delegado de Fiestas Mayores. La Banda Municipal interpretó las marchas "Virgen de las Aguas" y "Amarguras". Por lo que respecta al pregonero, era un sacerdote cofrade de la Amargura. Por ello, el fragmento que seleccionamos es el dedicado a María Santísima de la Amargura:

En la calle Tetuán, una Cofradía puede caber. Por allí vuelve la disciplinada y blanca fila nazarena de mi Amargura. Allí se mide una cabal Cofradía. Por allí llega el palio de mi Virgen, canon cofradiero, modelo y paradigma. Virgen en cuya cara el sufrimiento se ha resumido en dolor. Dolor moral, porque no es físico. El mayor dolor de los dolores. Y eso significa, en Ella, andar con el ritmo único de su paso, llevar la justa flor, y esa preciosidad de manto, y esa corona, y llevar a su lado la plática, aunque muda, de San Juan que la acompaña, y la marcha, su marcha, con su nombre, para aliviar tanta Amargura. Desde la Cruz hasta la banda, Silencio blanco, que vuelve hasta su templo.

Y poco después, la procesión medida, la estética con fondo así tan admirada, que se aprieta en Sor Ángela, delante del convento; y las puertas de la Casa Madre que se abren, y el zaguán y el interior que rebosan, y las Hermanas que rezan de rodillas ante mi Virgen. Diálogo que es unión en el amor y el dolor de los hombres, de los que María es Madre y ellas son Hermanas. Virgen y vírgenes que a diario viven y sienten, comparten y alivian el dolor humano en la Sevilla que las tiene por suyas. ¡Mi Virgen de la Amargura!, ¡mi anual vivencia en estas oraciones!

Foto: Juan Manuel Labrador