Solemne Función de Instituto a la Inmaculada en la Parroquia de Sta. María de las Flores y San Eugenio Papa
La Inmaculada Concepción, por ser la Madre del Salvador, fue dotada por Dios con dones a la medida de una misión tan importante. El Ángel Gabriel en el momento de la anunciación la saluda como llena de Gracia. En efecto, para poder dar el asentimiento libre de fe al anuncio de su vocación era preciso que ella estuviese totalmente conducida por la gracia de Dios siendo redimida desde su concepción. Esto lo que confiesa el dogma de la Inmaculada Concepción, proclamada en 1854 por el Papa Pio IX.
La eucaristía fue presidida por Ignacio Jimenez Sánchez-Dalp, párroco de la Iglesia y concelebrada por Joaquín Bejines Moguer, párroco emérito de dicha parroquia, ayudados por el diacono permanente José María López García, el sacristán Antonio Vargas Méndez y varios monaguillos.
La parte musical la puso el coro mixto parroquial de Sta. María de las Flores.
Fotos: Antonio Rendón Domínguez.