Provincia. Coria del Río acompañó a su Virgen del Carmen

Manuel Pinto Montero. Un año más Coria del Río acompañó a su Virgen del Carmen en la gloriosa jornada del 16 de julio. La venerada imagen de la Virgen del Carmen procesionó por las calles corianas en una calurosa jornada partiendo la procesión desde la Parroquia de Nuestra Señora de la Estrella, sede canónica de la Hermandad, para dirigirse hacia el embarcadero donde la Virgen es subida en la barcaza para pasear por el Río Guadalquivir que baña todo el municipio ribereño.

Nuestra Señora del Carmen es obra de Francisco Buiza que la talló en 1969, aunque no llegaría a la Hermandad hasta 1972. El Santísimo Niño que porta la Santísima Virgen en su mano izquierda es una talla atribuida a Cristóbal Ramos en el siglo XVIII. Para su Festividad la Virgen luce los tradicionales colores del hábito carmelita. Procesiona sobre su paso con respiraderos de plata, los cuales llevan redes marineras. Cuatro candelabros de guardabrisas, así como varios candeleros en la delantera, alumbran a la Santísima Virgen del Carmen.

Con la caída de la tarde la Virgen del Carmen regresa a tierra firme, tras haber rezado por todos los marineros en las aguas del Guadalquivir. Las notas musicales de la Banda Municipal de La Puebla del Río ponen sonido a la gloriosa procesión de regreso al Templo. En la avenida de Andalucía la campana de su Casa Hermandad la llamaba y la Virgen del Carmen volvió su mirada hacía la casa de todos los hermanos corianos del Gran Poder. Con paso lento se adentró en la calle Palomar donde una nube de incienso perfumó la calle al paso de la Señora del Carmen.

Marcaba el reloj la una de la madrugada cuando de nuevo regresó a su Templo, donde el Señor del Gran Poder la esperaba. En el interior del Templo Parroquial se rezó la salve y se cantó unas emotivas sevillanas a la Virgen de los Marineros que volverá a las calles de Coria del Río la noche del Miércoles Santo siguiendo los pasos del Señor del Gran Poder.