Nueva Dolorosa del escultor Adrián Lema

Arte Sacro. La nueva dolorosa, con la advocación de Nuestra Señora de la Victoria, es obra de Adrián Lema Gómez, respondiendo dentro del ciclo pasionista al momento en el que la Virgen va al encuentro de su hijo Cautivo y Rescatado.

Se trata de una talla en madera de cedro real, su altura comprende 1,66 centímetros, dimensión clásica de ocho cabezas concebida para ser vista tanto en un plano próximo al espectador como en una perspectiva diagonal ascendente cuando se entroniza. Sus ojos de cristal otorgan gran viveza a la mirada con los lacrimales enrojecidos y las pestañas superiores largas postizas para acentuar el naturalismo y sutilmente pintadas en el párpado inferior. Lleva tres lágrimas, en la mejilla izquierda una y dos en la derecha. La boca entreabierta permite ver los dientes y lengua tallados. Las manos extendidas delante del pecho actúan de recurso en el plano de incidencia de la vista y funciona de plano intermedio con la dulzura de su mirada a la vez que sustenta los atributos otorgados por el pueblo popular.

Se pretende buscar a la Madre de Dios en la majestad de su gesto dulce pero apenado de su rostro. La mirada es firme en la búsqueda de su hijo y todo aquel que la contempla, las cejas se apaciguan para conferir mayor dulzura a sus ojos grandes y llorosos.

La imagen será venerada en la localidad de Olivares (Sevilla).

Esta ataviada por José Antonio Grande de León. 

Fotos: Exteban Torres.