Septiembre de coleccionables. Antonio Sánchez Carrasco

Si algo es típico de septiembre, además de volver a los atascos y de volver a ver niños yendo al colegio con sus trolleys y con más sueño que un Nazareno de la Madrugá, son los coleccionables. El otro día esperando en la Gran Plaza me fijé en que tras años de sequía ha vuelto la bonanza en coleccionables. Y como mi cabeza no para de relacionarlo todo con lo mismo, se fue mi mente a lo cofrade. Pensé primero en estampas históricas de nuestra Semana Santa, recordatorios de cultos que ya no existen o bendiciones de imágenes y la estampa que la recordó. A partir de hoy mi mente fue un no parar. Recuerda a los pregoneros que marcaron la Semana Santa.  Los momentos más icónicos de la tele cofrade, con el número uno, la marcha que incita a la violencia, papeletas de sitio de todas las Hermandades incluidas las de coronaciones y extraordinarias, pinta tu propio Cristo, fabrica tu propio palio, como mandar un paso, desde la igualá hasta las órdenes que dar, con el número 1 la famosa pesetita, los archivos secretos de Arte Sacro, colección de noticias urgentes del Llamador..., mi mente siguió y siguió pero en ese momento llegó el 22 y ya todo se paró para seguir observando como la vida pasaba fuera del Tussam, aunque una frase retumbaba en mi cabeza "con el número 1..." cuantas primeras entregas darían los coleccionables cofrades, demasiadas quizás cuando estoy sólo debería de tener un principio, un fin y un destino. Debía de ser que el final de los días vacacionales empezaba a hacerme mella.

#LosLunesAlSol

Foto: José Luis Lechuga.