El Bellas Artes exhibirá la pintura española del Museo de Castres. Inmaculada Sánchez. Diario de Sevilla.
El discípulo de Murillo Alonso Miguel de Tovar, el fotógrafo francés Pierre Gonnord y los grandes maestros españoles del Barroco serán los protagonistas del otoño cultural en el Museo de Bellas Artes de Sevilla. Éstas son las claves de la programación del nuevo curso de la segunda pinacoteca de España, en la que destaca el maridaje entre los clásicos y las nuevas tendencias con la inclusión en sus salas de Pierre Gonnord, artista que empezó su andadura fotográfica en 1999.
Tras visitar Madrid y Bilbao y de mano de la Fundación BBVA, arribará a Sevilla el próximo mes de noviembre la exposición titulada Obras maestras del Museo Goya de Castres, que reúne más de medio centenar de obras, pinturas y dibujos, procedentes de los fondos del citado museo francés. Hasta el mes de febrero, el público sevillano podrá disfrutar de esta selección que narra con ilustres ejemplos la historia de la pintura española, desde el siglo XV y principios del XVI, con creadores de Valencia, Sevilla y Cataluña hasta el siglo XX, con Picasso, Rusiñol o Maruja Mallo. La muestra se inicia con las piezas góticas de Mates y Alejo Fernández e incluye artistas del Renacimiento como Francisco de Osona y Pantoja de la Cruz. Continúa con una representación del Siglo de Oro a cargo de Herrera El Viejo, Francisco Pacheco, Ribera, Zurbarán, Arellano, Alonso Cano y Murillo; obras de Goya que ilustran el siglo XVIII (destacarán la presencia de dos de los tres cuadros del aragonés que posee el museo francés) y autores del XIX y primera mitad del XX entre los que se encuentran: Federico Madrazo, Beruete, Sorolla, Zuloaga, Santiago Rusiñol, Óscar Domínguez y Maruja Mallo, para finalizar con el malagueño Pablo Picasso.
Mucho antes, concretamente el próximo mes de septiembre, el Bellas Artes inaugurará su temporada expositiva con una monográfica en torno a la figura de Alonso Miguel de Tovar (1678-1752), destacado discípulo de Bartolomé Esteban Murillo. Pintor de cámara de Felipe V, cuando entre 1729 y 1733 Sevilla se convirtió en sede de la corte borbónica con motivo de la estancia del rey y su familia, es reconocido por sus lienzos de temática religiosa. De su producción guarda la ciudad ricos ejemplos como La Virgen del Consuelo (1720), del Altar del Consuelo de la Catedral, o la primitiva pintura al óleo de la Divina Pastora, iconografía que creó Tovar siguiendo las detalladas directrices de Fray Isidoro de Sevilla. Además, se están ultimando los trámites para el préstamo del lienzo La Virgen de la Faja, que atesora el Museo de Cádiz.
Dando un salto en el tiempo de tres siglos, la pinacoteca que dirige Ignacio Cano abrirá sus puertas a las nuevas corrientes creadoras con la exposición de fotografías del francés Pierre Gonnord. Artista afincado en Barcelona, traerá a Sevilla a finales de octubre una selección de los inquietantes retratos que le caracterizan, protagonizados por jóvenes urbanos, vagabundos, geishas, mujeres japonesas tatuadas, outsiders o travestis, todos ellos personajes de rostro impenetrable y mirada inquisidora. Además, a partir de la próxima semana, Gonnord estará en Andalucía para trabajar una nueva serie sobre el colectivo gitano. El artista, ligado profesionalmente a la galería de Juana de Aizpuru, desarrollará su tarea de investigación por las provincias de Jerez y Sevilla.