Provincia. Ha muerto Miguel Román, Parroco de Utrera, a los 84 años de edad

Arte Sacro. El sonido de los nueve dobles de las campanas de la parroquia de Santa María de la Mesa de Utrera  Don Miguel Román Castellano anunciaron esta mañana a la población la muerte de su párroco, Miguel Román Castellano, uno de los más ancianos de la localidad y una de las personas que mejor conocía la historia del último medio siglo de Utrera. Rector del Santuario de Consolación y párroco de Santa María, Miguel Román Castellano, falleció esta mañana en el hospital de Valme a la edad de 84 años. El sacerdote había acudido al hospital el pasado martes para una revisión médica, en la que se observó que la pierna izquierda presentaba muy mal estado a causa de problemas circulatorios. Quedó hospitalizado y, ayer viernes se le intervino quirúrgicamente con anestesia epidural para amputarle la pierna. Según la propia familia, “todo fue bien en la intervención y él salió del quirófano muy animado y hasta con ganas de guasa, tal y como era su carácter”, por lo que hasta el momento no se han precisado las causas exactas de su fallecimiento. Sin embargo, esta mañana su estado empeoró y falleció. A pesar de su imposibilidad física que le mantenía postrado en una silla de ruedas, Miguel Román ofició misas hasta sus últimos días.

Miguel Román nació en Sevilla un 8 de abril de 1921 y fue bautizado en la parroquia de la Magdalena. Cursó estudios de enseñanza primaria en el C.P. Grupo de la Borbolla. Tuvo una vocación tan temprana que con tan solo doce años ingresó en el Seminario. Fue el 31 de mayo de 1947 cuando se ordenó sacerdote en la capilla pública del Palacio Arzobispal. Ofició su primera misa el 8 de junio de 1947 en la parroquia sevillana de San Roque y San Benito. Sus inicios en el sacerdocio le llevaron a Isla Cristina, La Redondela , El Pozo del Camino, Gilena y Sevilla (fue coadjutor en San Román y encargado de la iglesia filial de Santa Catalina). Su llegada a Utrera, en concreto a la parroquia de Santa María donde ha permanecido hasta su muerte, se produjo el 7 de julio de 1956, por orden de Bueno Monreal.

El alcalde de Utrera, Francisco Jiménez, ha decretado tres días de luto por el fallecimiento del sacerdote y desde primera hora de la mañana las banderas ondean a media asta en el municipio. Jiménez ha lamentado “la pérdida de un hombre que siempre se ha volcado con nuestro pueblo y que forma parte de nuestra historia más reciente”. El alcalde también ha recordado “lo ilusionado que D. Miguel estaba con todos los actos conmemorativos de la celebración del V Centenario de la llegada de la Virgen de Consolación a Utrera, su fallecimiento es una gran pérdida y es una lástima que en ese momento no pueda estar con nosotros”. 

Si los trámites burocráticos (certificado de defunción y traslado) se agilizan, posiblemente esta tarde se instale la capilla ardiente en la parroquia de Santa María de la Mesa. El Cardenal Arzobispo de Sevilla Carlos Amigo Vallejo ha mostrado sumo interés en presidir las honras fúnebres, y que dado lo apretado de la agenda de monseñor, la misa de corpore in sepulto se oficiaría mañana domingo a primera hora.

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