Procesión Extraordinaria del Cristo de la Sangre de Aracena

Luis M. Fernández. El 1 de diciembre de 1943, el imaginero y escultor ayamontino, Antonio León Ortega, entregó a la hermandad de la Vera+Cruz de Aracena la nueva imagen, realizada en madera de ciprés, del Santísimo Cristo de la Sangre, que venía a reemplazar a la anterior, perdida en los tristes sucesos de 1936. Se cumplen, pues, 75 años de aquel momento y, por ello, la hermandad ha preparado durante este año numerosos cultos y actos, que culminaron el pasado sábado con la procesión extraordinaria del Señor sobre su paso, obra de Guzmán Bejarano.

Acompañan al Cristo dos sayones de talla completa, también obra de León Ortega. Cabe decir que, sobre ellos, el escultor aracenense Alberto Germán Franco, cuya tesis doctoral versó sobre el imaginero de Ayamonte,  afirmó, en un acto celebrado días atrás con motivo de este aniversario, que merecería la pena verlos sin los ropajes de tela que los cubren, para así poder apreciar adecuadamente la magnificencia de las tallas. También figura un soldado romano, obra reciente de José Antonio Navarro Arteaga.

La procesión partió de la sede de la hermandad, en la Iglesia Prioral del Castillo, proporcionado momentos bellísimos la bajada desde dicho templo. El cortejo estaba formado por las  representaciones de las demás hermandades cebolleras y por hermanos y hermanas con cirio, luciendo ellas la tradicional mantilla española. El acompañamiento musical corrió a cargo de la A.M. "Santísimo Cristo de la Bondad" de Alcalá de Guadaíra y el grupo de acólitos era el de la hermandad de Pasión de Huelva.

El insuperable marco de las calles, cuestas y paisajes de la localidad serrana fue un acicate más para disfrutar de la procesión, donde pudimos encontrarnos muchos cofrades sevillanos, en una tarde que los lugareños calificaban de calurosa, pero que a los que subimos desde la tórrida Sevilla nos pareció muy agradable. Les ofrecemos algunas imágenes de la misma.

Fotos: Luis M. Fernández.