Mercedes: Orgullo de su barrio del Tiro de Línea. Pedro Merino

Eran las tres y cinco de la madrugada del domingo cuando la Virgen de las Mercedes atravesaba el dintel de entrada de su templo de Santa Genoveva. Antes, a las 19,45 del día anterior, lo había hecho para salir e instalarse en el altar efímero montado con ocasión de la celebración del L Aniversario de la Fundación de la Hermandad, donde se celebraría el Pontifical presidido por el Cardenal de Sevilla Fray Carlos Amigo, en el cual se hizo entrega a los hermanos fundadores de la Hermandad de la medalla del cincuentenario, aprovecho esta ocasión para felicitar entre otros a mi amigo Julián Hernández, que fué uno de los muchos que la recibió.

También durante el pontifical se firmó el acuerdo, con el visto bueno de Palacio, de la hermandad entre las corporaciones de Santa Genoveva y los Estudiantes. Tras dicho Pontifical, la Virgen en su paso de palio comenzó sobre las 10,25 de la noche su procesión triunfal por el barrio conmemorado este L Aniversario.

Cabe destacar principalmente la gran cantidad de fieles que acompañaron en todo momento a la Virgen, desde su salida hasta su entrada. Tuvo una petalada en la calle Marchena y saludó en la Iglesia de San Juan de Avila, del barrio, donde se aprovechó para recomponer el candelabro de cola derecho que sufrió desperfectos durante la procesión.

A la hora ya dicha, la Virgen de las Mercedes entró, pero previamente dispuso de unos bellos instantes girando el paso completo en la confluencia de Av. de los Teatinos y Romero de Torres a sones de marchas dedicadas a su hermandad madrina, la Macarena. En ese mismo lugar había estado instalado el altar de celebración cinco horas antes, cuando el palio llegó para recogerse sólo quedaba del mismo su esqueleto metálico, el cual afeó un poco la bellísima entrada de la Señora.

Por último, reseñar como todos saben, que la Virgen de las Mercedes lució el manto verde "el camaronero" cedido por la Macarena. Enhorabuena a todos los hermanos de Santa Genoveva y a su Junta.

Fotos: Francisco Santiago / Pedro Merino