Opinión. Nuestra Señora de Valvanera, olvido de su patronazgo en la Calzada. Isabel Serrato

El pasado 2 de mayo se inauguró la asociación de vecinos del barrio de la Calzada. No sé si éste es el nombre correcto, pero como no me siento identificada con ellos, tampoco he querido molestarme en saber o conocer su nombre completo o concreto.

Si no me siento identificada con ellos es porque se han olvidado de mi Madre. Sé que para la inauguración del local y la posterior “copita” invitaron a todos los vecinos, a políticos que se sabe de su asistencia por la época electoral, a mi Hermandad de San Benito, a negocios... menos a mi Madre, Patrona de un barrio del que dicen ser la asociación que lo representa. No sé si es porque somos de gloria, antigua tradición en Sevilla, pero claro, ellos desconocen este mundo, o por rencillas que llevan teniendo con nuestra corporación desde el pasado mes de septiembre cuando intentaron aprovecharse de un pasacalles conocido en la Calzada porque todos los años lo organiza la Hermandad de Valvanera para anunciar la salida al día siguiente de mi Madre (ellos querían el pasacalle para promover una velá, con sus cervecitas y montaditos, y que no tuvo ningún éxito, pues encima con ella querían emular una velá del pasado, pero ni en el nombre de la misma acertaron).

He nacido y vivo en la Calzada –no acabo de llegar a estas tierras como otros–, y me duele el suelo por el que piso, y vosotros a mí no me representáis. No podéis o no debéis ser capaces de olvidar la imagen mariana con más años arraigada en este lugar, y jamás debéis olvidar a mi Virgen y a su Hermandad, que os guste o no, Ella, mi Madre, a la que habéis olvidado no invitando a una copita-inauguración de una asociación de vecinos de la que yo dudo, Ella, insisto, es la Patrona y única representarte del barrio de la Calzada.

Pido perdón si he ofendido a alguien, quizás, por la claridad de mi opinión, pero como hermana de Valvanera, miembro de su Junta de Gobierno y vecina nacida en el barrio, me siento dolida y apenada porque de nuevo por ser de gloria somos olvidados, y ese carácter letífico no es más que el mayor orgullo al pronunciar el nombre de María. Pido también disculpas por aprovecharme para expresar mi opinión (y sentirme bien) al ser colaboradora de este portal cofrade.

Isabel Serrato Martín,
Secretaria 1ª de la Hdad. de Valvanera

Foto: Francisco santiago