Provincia. "La Bendición de Gelves". Hermanos Viretti

Son las cinco de la tarde, y Juan de Dios abre las puertas del cielo de Gelves para poder contemplar mas cerca a la Madre de Dios, que baja de su trono para bendecirnos y dejarnos besar su bendita mano mientras el Salvador del mundo nos bendice cuando nos acercamos.

Son las cinco de la tarde en el que el calor aprieta entre los muros de la parroquia de Nuestra Señora de Gracia y descansamos nuestros cuerpos en el típico banco, como si estuviéramos en casa; y en casa parecíamos estar por que la Virgen nos miraba y nos decía ‘’acercaros hijos míos, venid aquí junto a mi y contemplad a Jesús que con sonrisa tierna y talante juguetón quisiera hacernos recordar que todo no solo es su pasión, si no también su juventud’’ , y nos acercamos…, nos acercamos tanto, que el niño parecía saltar de alegría en los brazos de su madre mientras ella no nos quitaba la mirada por la visita que solemos hacerle, convirtiéndose en costumbre.

Tras un largo periodo de tiempo, llegó la hora de marcharnos, y mientras recogíamos el trípode y equipo fotográfico, el niño empezaba a ponerse triste por que ya se iban sus amigos….sus hermanos,…antes de salir me acerque y le dije ‘’Mama, distráelo para que no nos vea salir por la puerta….’’, giré la cabeza y vi a Jesús que estaba pendiente de todo, y haciéndole cosquillas en los pies mientras me sonreía le decía ‘’mi pequeño Salvador del mundo, te prometo que nunca me olvidare de ti, siempre te llevo en mi corazón, además ya queda poco para reunir a toda la familia para el próximo Domingo 31’’. Antes de cruzar el dintel, gire mi cabeza para verlo por ultima vez y me decía ‘’un hasta el Domingo’’ con su mano bendita.

Fotos: Hnos. Viretti.