Arte Sacro
  • Noticias de Sevilla en Tiempo Ordinario
  • martes, 28 de mayo de 2024
  • faltan 320 días para el Domingo de Ramos

El Cardenal de Sevilla coronó canónicamente a la patrona de El Viso. A. Mallado. ABC


SEVILLA. En Santa María del Alcor han puesto los visueños todos sus anhelos a lo largo de los siglos. A ella le rezan y lucen su nombre, Alcora, muchas mujeres del pueblo. Ayer pusieron una corona en sus sienes y durante todo el mes han colocado a su alrededor la alegría de quien celebra un día grande con la vecina más querida del pueblo. Las manos del cardenal Carlos Amigo Vallejo eran las que posaban la corona en sus sienes, pero como dijo: «Todo El Viso te corona».

El Viso mantiene su identidad y su carácter de pueblo y por eso la celebración de la Coronación de su patrona tiene el ambiente que tendría la boda de una mocita visueña, de una Alcora conocida por todos. La Alcora que ayer se coronó se ha paseado estos días por el pueblo en Novena Itinerante, para anunciar su día grande y contar cómo era el vestido que estrenó ayer y que le han regalado entre todos. Ayer daba el último paseo y la imagen llegaba al altar situado en el Parque de la Constitución acompañada de mujeres vestidas de mantilla y se iban llenando las 3.800 sillas preparadas, que han sido insuficientes ante la asistencia de fieles.

Las hermandades han ido aportando piezas del hermoso conjunto que ayer lucía la Virgen, en el que destacaba el manto bordado en el que Miguel Ángel Crespo y María Felisa Jiménez han escrito con letra de pespunte la historia de El Viso.

Como si fuera una boda, la de Alcora tuvo un padrino de lujo, Manolo Roldán «el Campanero», que tiene calle en El Viso y al quien el Papa le concedió la medalla «Pro Eclecsia et Pontifice», por su dedicación a la parroquia, por marcar con sus campanas durante lustros el ritmo de la vida de su pueblo. No se puede ser más de El Viso que Manolo, porque durante su vida no ha habido niño al que le pusiera, antes que el cura, metálico nombre con el tañir de sus campanas, ni muerte que no tuviera el triste deber de anunciar, ni boda sin los parabienes que lanzaba al aire desde su torre. Para él fue el primer abrazo del cardenal después de coronar a la Virgen y mientras el cielo atronaba en fuegos artificiales, pasadas las ocho y media de la tarde.

La misma sonrisa franca de Manolo se repetía en los rostros del pueblo, que durante tres años han preparado la coronación, no sólo en lo material, sino también con el desarrollo de una importante labor pastoral, como destacaba, el presidente del Consejo de Hermandades, José María Alcántara.

La gente de El Viso se mostraba ayer en estado puro. Todos exhibían el orgullo de haber transformado su pueblo en una fiesta desde hace nueve días. El orgullo de un pueblo sin apenas tierra que ha tenido desde siempre que buscar el sustento de mil maneras presididas por el ingenio. Dejaban que asomarán brillos a sus ojos.

Con los visueños estuvieron también la consejera de Gobernación Evangelina Naranjo; el delegado del Gobierno de la Junta en Sevilla, Demetrio Pérez; el vicepresidente de la Diputación, Jesús Téllez; el alcalde de Mairena, Casimiro Gavira; el presidente de la Organización Médica Colegial, Isacio Siguero o el pintor Juan Roldán.

La Coronación de su patrona se ha vivido como algo histórico en El Viso del Alcor y ha deparado sucesos de profunda significación como los que narró el Cardenal en su homilía, «estos días hemos visto como familias enemistadas durante años se han abrazado delante de Santa María del Alcor», dijo.

Para la celebración de la efeméride no es suficiente con los actos de ayer, así que el próximo día 12, la Virgen saldrá también en procesión, igual que lo hace todos los años. Y el próximo domingo irán en romería al campo.

http://sevilla.abc.es










Utilizamos cookies para realizar medición de la navegación de los usuarios. Si continuas navegando, consideramos que aceptas su uso.