Provincia. La luz del día iluminó a la Asunción de Cantillana en una histórica y extraordinaria procesión

Eduardo Fdez. López. Seis meses y un día, más o menos según se mire, ese es el intervalo de tiempo que hay entre las dos últimas procesiones de la Asunción de Cantillana y entre la última y la próxima, o más claro, este año 2015 Cantillana ya ha vivido un 15 de agosto con su Asunción.

Pero un 15 de agosto a la inversa, la noche se cambió por el día y el calor por el frío, así quiso vivir la Hermandad cantillanera el 175 aniversario de la llegada de la imagen al pueblo, con una procesión extraordinaria y una Misa Estacional en la Plaza del Llano.

A las diez de la mañana la venerada imagen salía del templo al que da nombre y al que llegó de madrugada tras poco más de un mes retirada del culto para su restauración en el taller del restaurador Pedro Manzano, le antecedía un cortejo con las representaciones de las hermandades invitadas y acompañada musicalmente por la Banda de Música Nuestra Señora de la Victoria, así llegaría hasta el monumental altar montado en la Plaza del Llano y donde pasadas las doce y media del medio día comenzó la Misa Estacional presidida por el Obispo Auxiliar de Sevilla Monseñor Santiago Gómez Sierra.

Al finalizar la misma comenzó la triunfal procesión de la imagen por las calles de su pueblo, en esta ocasión ya sin cortejo y con la banda local de Nuestra Señora de la Soledad poniendo sus sones musicales tras la imagen asunta.

El paso, comandado por Antonio Santiago discurrió en todo momento acompañado por numerosos devotos de la Santísima Virgen, una procesión que como ocurre cada 15 de agosto es todo un derroche de amor y fervor de sus devotos a la Asunción, vivas, aplausos y un sin fin de cohetes la acompañaron hasta que regresaba a su templo a las ocho de una fría tarde ya de un 14 de febrero.

Un 14 de febrero, conocido por ser el día de los enamorados y que en este año 2015 nos demostró el amor que a esta imagen le tienen sus fieles, un 14 de febrero donde la noche se hizo día y el calor se convirtió en frío.

Fotos: Eduardo Fdez. López.