Buen Fin jerezano. Antonio Sánchez Carrasco

En ese repaso diario que hago sobre mis fotos para buscar alguna que me cuente algo. Que me permita escribir unas letras sobre ella.

Y así me encontré con esta foto de la Virgen del Buen Fin de Jerez de la Frontera.

Nunca una advocación tuvo más significado que esta, en los tiempos que nos ha tocado vivir.

Porque llegará un día, que podamos ir a verla. Llegará el día que nos acerquemos hasta Jerez para andar por sus calles, para beber y comer en sus tabancos y ver iglesias abiertas entre ellas la Basílica del Carmen, donde un Cristo alanceado nos conquistó el corazón desde el primer día que los vimos.

Guardamos abrazos para nuestro amigo Alberto, que siempre está pendiente de su hermandad de nazarenos pardos y carmelitanos.

Será una alegría para el espíritu volver a Jerez, porque siempre es agradable volver donde se encuentra uno a gusto.

Algún día volveremos a sus plantas, volveremos cerca de la Madre del Buen Fin, que tan bella tallara Álvarez Duarte. Mientras tanto seguiremos rezándote en la distancia.

Foto: Antonio Sánchez Carrasco.