La Virgen de Loreto recibió la Rosa de Pasión, embajadora de los Donantes de Órganos

Fco Javier Montiel. El pasado jueves, 3 de febrero tuvo lugar en la parroquia de San Isidoro, el íntimo acto de entrega la Virgen de Loreto, patrona de aviación, de la Rosa de la Pasión, embajadora de los Donantes de Órganos, para que pueda lucirla durante la novena en honor de Stmo Cristo de las Tres Caídas. 

La hermandad de Las Tres Caídas de San isidoro es la 29 hermandad de esta cadena de solidaridad y de vida que en reconocimiento a todos los donantes de órganos viene teniendo lugar entre numerosas hermandades para seguir fomentando las donaciones y dar así vida y esperanza a todos los enfermos que esperan recibir un trasplante.

El íntimo acto contó con la presencia de miembros de la Junta de Gobierno de la Hermandad de la Vera+Cruz de la Algaba con Fernando Cruz Marquez, Hermano Mayor de la corporación al frente, el hermano mayor de la hermandad de Las Tres Caídas de San isidoro, José Manuel Rubio Sotillo, el Doctor José Pérez Bernal, pacientes trasplantados, así como de donantes y familiares de donantes.

El médico resaltó que esta Rosa de Pasión itinerante ha conseguido hacer una excepcional “cadena de solidaridad y de vida” entre las hermandades de la Archidiócesis.

Con su presencia se hace un homenaje a los donantes de órganos, se fomenta las donaciones, se lucha por la vida de los enfermos y se transmite esperanza a todos los que esperan recibir un trasplante para seguir viviendo. Como dijo el Papa Francisco "la donaciones son un acto supremo de amor al prójimo".

La Rosa de Pasión es una distinción que el programa de “Cruz de Guía” de Radio Sevilla concedió a las hermandades por su apoyo a las donaciones de órganos. Esta joya de los hermanos Marmolejo la recogió el Dr. Pérez Bernal, quien mostró el compromiso de rotarla por todas las hermandades implicadas en esta gran obra social.

Antes de hacer la entrega de la Rosa de Pasión a la hermandad de Las Tres Caídas de San isidoro, el Hermano mayor de la Corporación Crucera dirigió unas palabras de agradecimiento por haberla tenido durante los cultos  y reconoció la labor realizada por las hermandades y su apoyo a las donaciones de órganos. Hizo mención al compromiso de seguir sensibilizando sobre las donaciones y con el optimismo de seguir donando vida. 

José Manuel Rubio Sotillo, hermano mayor de la hermandad de Las Tres Caídas de San isidoro, habló de la importancia que tiene para su hermandad el compromiso con la vida desde su concepción hasta la muerte natural. Y que no hay nada más importante que dar vida, destacando la generosidad que es dar vida a través de las donaciones de órganos.

Al finalizar el acto el saetero Fco Javier Montiel, dedicó su oración cantada a Nuestra Señora de Loreto.

Fotos: Fco Javier Montiel.