Dominica in albis. Antonio Sánchez Carrasco
Domingo en blanco por las vestiduras y en verde, por razones obvias. Y no, no voy a hablar de fútbol. Pero si de un par de reflexiones que me surgieron después de la final de Copa. La primera me surgió al ver un tuit de nuestro Arzobispo. Seguro que le habían contado aquello del cainismo sevillano, pero poco lo había notado en sus carnes hasta que tras su tuit de felicitación, de manera institucional, alguien lo llamó payaso porque no le pareció bien el tuit mientras que en la Madrugá sólo había siete WC para los nazarenos. Lo que es mezclar churras con merinas. Señor Arzobispo, ya sabe como es Twitter y más si es entre los bandos sevillanos. No lo tenga usted en cuenta, que somos muchos los sevillanos de muchos bandos, que necesitamos su frescura en la Red del pájaro azul.
Otra de esas cosas curiosas extrapolables a la Semana Santa, que me llamó la atención, y es que vimos por la mañana la ausencia de cualquier medio de control con la afición visitante y aforamiento por la noche con la afición de aquí y no se porque se me vino a la memoria las vallas y los nazarenos detrás. No se si me explico sin bufanda y sin colores, como se desarrolló el día de final sirvió para observar y pensar. Pero bueno en estas estábamos que el Santísimo salió desde la Catedral, ya que el Sagrario sigue en obras.
Y nos dejó otras imágenes curiosas de como Sevilla va evolucionando a veces olvidando a los sevillanos.
La Sacramental del Sagrario puso a cero el contador para la próxima Cuaresma. Sigan siendo felices.
Y a seguir con el espíritu de capirote de ala ancha que tanto nos gusta por esta Ciudad, ya vamos a estar planchando el caballo.
#LosLunesAlSol
Foto: Antonio Sánchez Carrasco.