El adiós de un señor de la fotografía. Antonio Sánchez Carrasco

Otro de esos señores que poco aprecian en su justa medida dentro de la Ciudad, José Antonio Zamora, nos escribió un whatsapp desde Roma donde el día de San Raúl pasaba sus horas para disfrutar de la Ciudad Eterna “Jesús ha muerto”.

Ya nos tenía informado a los amigos del diafragma y los ISO, “Jesús está mal”, un rato después te enviaba una foto de la Fontana de Trevi, porque así somos los que nos dedicamos a la fotografía, no podemos resistirnos a compartir la belleza a pesar de que fuera la lluvia de la vida diaria caiga a plomo sobre nosotros. Todos teníamos la Esperanza de que Jesús Martín Cartaya no se fuera nunca, de verlo en un rincón de la próxima Cuaresma cámara en ristre, en el lugar adecuado sin que se note que está.

No les voy a contar la vida de Jesús porque para eso Álvaro Pastor, Pepe Morán y el ya nombrado Zamora seguro que sabes más que yo de aquí a Lebrija, sin embargo no puedo más que pensar todo aquello que aprendí de Él sólo con observarle y sólo con una conversación.

Aún recuerdo la conversación telefónica de estrangis durante el COVID, gracias a un cofrade anónimo que sirvió para que sintiera lo querido que era fuera de los muros del Hospital. Se ha ido Jesús Martín Cartaya quien nos enseñó que, con humildad, buen talante y ojo fotográfico se puede conservar la historia de esta Ciudad

 #DescansaEnPazMaestro

Foto: Antonio Sánchez Carrasco.