La Bienal de Flamenco galardonada con el premio Andalucía de Turismo

El fallo de los premios fue dado a conocer recientemente por el consejero de Turismo de la Junta de Andalucía, Paulino Plata. Este premio lo obtiene en la categoría “institución pública o privada” por convertirse en  un producto cultural de primer orden con un atractivo turístico incalculable y en expansión tanto en espacios escénicos como en volumen de asistencia.

Un congreso de flamenco celebrado en 1979 marca el inicio de lo que será , 26 años después, el mayor y más importante acontecimiento de flamenco: la Bienal de Flamenco de la ciudad de Sevilla. En este congreso participan hombres como José Luis Ortiz Nuevo, por aquel entonces delegado de Cultura del Ayuntamiento de Sevilla y posteriormente director de nueve ediciones de Bienal; Emilio Sáez, fotógrafo; los presidentes de las peñas flamencas Torres Macarena y el Cerro, Manuel Centeno y Leopoldo Iglesias, respectivamente; Francisco Cabrera, presidente de la Federación de Peñas y un secretario, que posteriormente será nombrado director de las Bienales celebradas en 2000 y 2004, Manuel Herrera.

En este congreso se concreta la idea de ofrecer al mundo una muestra señera con identidad propia que recoja lo mejor del flamenco cada dos años. La primera Bienal nace en 1980 siendo director Ortiz Nuevo. Lo abre un manifiesto pronunciado el 27 de marzo. Coincidiendo con la XIII Edición en el año 2004, en las Reales Atarazanas y un 27 de marzo 25 años más tarde se vuelve a pronunciar también por su director un manifiesto Bienal en conmemoración del leído en la década de los ochenta.

La Bienal , desde el principio, queda vinculada a otras manifestaciones artísticas tales como, el teatro, el cine, la música, la poesía y las artes plásticas. Se desarrollan mesas redondas. Están presentes los medios de comunicación y los premios y las menciones.

Esta vinculación se ha venido manteniendo hasta nuestros días y la edición que se celebra este año, la decimocuarta, también contemplará otras actividades que aumentan el atractivo del acontecimiento flamenco.

La Bienal ha crecido en número de espacios, en aforo, en  número de espectáculos, en venta de entradas. Se implica la ciudad y el ciudadano. Llegan turistas con un único objetivo: ver un espectáculo de la Bienal de Flamenco. Y los datos quedan reflejados en los estudios “Saeta” elaborados por la Junta de Andalucía en los que demuestran el especial atractivo turístico que supone el acontecimiento Bienal para la ciudad y para la Comunidad Andaluza.

Se afronta este año 2006 la XIV edición con nuevos retos, con la visión de nuevos horizontes y con la convicción de explorar nuevos espacios, nuevos públicos, nuevos caminos.

La Bienal que comenzará el 13 de septiembre de 2006 apuesta por un nuevo modelo de gestión que la lleva a ser, 1 vez más, el referente. Quiere implicar a nuevos sectores, quiere viajar a otros países. Por ello, estuvo presente en Japón. Y estuvo en París y en Mont de Marsan en su Festival Flamenco presentando su programación. Y estará en otros lugares.

El premio Andalucía de Turismo será entregado en tiempo de Bienal. De esta forma, se reconoce la labor que viene desarrollando este importante acontecimiento que no sólo fomenta, difunde y promociona el flamenco como Arte Universal, sino que por ende, convierte a Sevilla y Andalucía en un foco turístico de excelencia cultural.

En palabras del director de la Bienal , Domingo González, “el premio constituye un reconocimiento al trabajo que desde hace más de 25 años vienen desarrollando artistas, compañías y todos cuantos se han visto implicados en la puesta en marcha y funcionamiento de la mayor y más importante cita flamenca.”

La Bienal se ha convertido en producto cultural de primer orden. Es un atractivo turístico incalculable y así lo entienden los grandes touroperadores  que se acercan a ella. Una Bienal entendida como incentivo, abierta a las colaboraciones con los agentes implicados y relacionados con el sector para que puedan brindarle una proyección internacional que abra camino a un futuro que ya es realidad.