La última obra de Fernando Castejón: El Nazarenito

Moisés Viretti. Así lo llama cariñosamente su dueño, Israel Viretti, ya que su autor, Fernando Castejon se basa en su obra ya reconocida en toda la capital andaluza, como el Señor de Nazaret en el sevillano Barrio de Pino Montano.

La imagen del niño Dios está realizada en barro cocido; la túnica está realizada cariñosamente por la viuda del inolvidable Rafael Castejon y las potencias doradas, adquiridas en el taller de Fernando de la Poza.

''Una tarde de juegos y una visión inolvidable''

Pasado el mediodía y llegada la tarde, los niños de nazaret salian de sus casas para adentrarse en los campos, y así jugar al escondite; entre ellos, se encontraba Jesús, el hijo de José el Carpintero. Al comenzar el juego, todos corrían para esconderse, y Jesús, al prepararse para salir como alma que lleva el viento tropezó con una pequeña peña y cayo al suelo.

Estando su cuerpo en el suelo y con las manos heridas por el impacto contra el mismo, vio como de la tierra brotaba un soga, en el que su mente quedo totalmente apartada de aquel inocente juego y de aquella dolorosa caída, en el que este se veía apresado por sus propios semejantes y extranjeros sin culpa alguna.

Sus amigos, corrieron en su auxilio y al ver que este apenas se levantaba, quedaron sorprendidos por aquel reflejo de ojos que sin parar tomaron las primeras lagrimas.

Sin soltar aquella pequeña soga y al sacudir su túnica blanca al levantarse, apoyó su talón en la peña que le hizo caer; y con tristeza miró a sus amigos y les dijo mostrandole aquella soga:

''Así será el principio de la salvación del mundo, sin embargo yo, en esa hora de tinieblas no tendré a nadie quien me quiera quitar el cáliz, si no es por la voluntad de mi padre''.

Sus amigos no entendieron nada de lo que Jesús les había dicho, sin embargo, le ayudaron a curar sus heridas y lo llevaron junto a su madre...''

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Foto: Israel Viretti