Arte Sacro
  • Noticias de Sevilla en Tiempo de Pascua
  • viernes, 17 de mayo de 2024
  • faltan 331 días para el Domingo de Ramos

Desde Cádiz. Ya es verano. Manuel Bernal Andamoyo.


¡Ya es verano en San Francisco! No. No es un slogan publicitario de ningún gran almacén. Es que ya nos hemos acostumbrado en los últimos años, los que acudimos a esta plaza a disfrutar de su ambiente, de su frescor, de la esencia que se mantiene en la atmósfera especial que en ella perdura, a la algarabía  que cada verano la envuelve, cuando ellos llegan. Como la primavera se hace presente cuando llegan los vencejos, las golondrina y las cigüeñas, en este diminuto universo, donde el tiempo es un paréntesis congelado donde paladear sin prisas lo mejor que nos queda de lo que fue esta ciudad, el verano de verdad comienza, cuando a ella arriba una bandada de dorados pajarillos, que para nuestra fortuna anidan en San Francisco durante varias semanas del estío, tras recorrer, en migración, de punta a punta Europa.

Dicen que vienen aquí porque aquí se les mejora la vida y han acabado dando vida a San Francisco y a los que allí veraneamos. La plaza, cuando ellos partes rumbo a sus lugares donde pasarán el invierno, se queda como suspendida en el tiempo a la espera de su vuelta, a verlos comer helados, a ver como corren, como juegan, como pasean su dulzura de mocitas tempraneras, a como disparan con fuerza el balón contra la puerta del convento.

Se les espera durante todo el año, se les espera y se prepara su llegada. Entre todos hay que unir esfuerzos para hacer posible que cada verano vuelvan a esta plaza, que ya, a buen seguro, formará parte del  recuerdo de su infancia entre nosotros. Comenzaron siendo unos pequeñines y ya casi despuntan para muchachillos y muchachillas. Piel casi transparente, pelo como auténtico reflejo del sol y un color de ojos de mar en calma. Nos hemos acostumbrado a ellos. Vienen de la mano de los hermanos de la Vera-Cruz, pero a muchos cada vez se nos hace más larga la espera, hasta el momento en el que los niños bielorusos llegan a Cádiz para hacer más completo nuestro verano en San Francisco.










Utilizamos cookies para realizar medición de la navegación de los usuarios. Si continuas navegando, consideramos que aceptas su uso.