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Carta abierta a Fernando Gelán. Carmelo Martín Cartaya.


 Ante la imposibilidad de contestar directamente a Fernando Gelán sobre un artículo publicado en su página Web www.gelannoticias.com, por carecer de dirección de correo electrónico, titulado "En la coronación de la Virgen de la O, se olvidan de la figura de Ramón Martín Cartaya", 'utilizo' a los amigos de Arte Sacro para la la inserción de la contestación que a continuación transcribo. Carmelo Martín Cartaya.
 
"Estimado Fernando:
 
Verdadera sorpresa me causa tanto el titular como el contenido del artículo aparecido en tu página Web “Gelán-Noticias”, relacionado con la  exposición que está llevando a cabo la Hermandad de La O en el Círculo Mercantil e Industrial, en la calle Sierpes, con motivo de la próxima Coronación Canónica de la Virgen de la O.
 
Te vuelvo a repetir, que lo que citas de que en esta exposición se olvida de la memoria de Ramón Martín Cartaya, da la casualidad que resulta todo lo contrario, pues aunque citas textualmente “Entre estas imágenes, ni una dedicada a exaltar y recordar la figura de quien…”. Escribes que “…ningún medio ha hecho referencia, según tú, a este mal detalle de la Hermandad…”; créeme que no se a que viene eso que dices, pues de lo que se trata es de la muestra, muy sucinta, de la rica y dilatada vida de una hermandad que está presente en la vida cofradiera y religiosa de Sevilla desde el siglo XVI, y por tanto muchos hermanos y hermanas a destacar.
 
Citas que fue “…hermano mayor en tiempos difíciles…”. ¡Cuantos hermanos, sean mayores o menores, han estado a pie de cañón en tantos tiempos difíciles que ha padecido esta Archicofradía a lo largo de su historia. Concretamente en el siglo XX no solo Ramón padeció este “calvario”, sino otros muchos, en su labor de hermanos mayores. No nos podemos olvidar de la república y guerra incivil del pasado siglo XX, donde muchos cofrades de La O, entre los que hay que incluir a nuestro progenitor, cofrade ejemplar y Hermano Mayor Honorario, Antonio Martín Alborch, quien junto con otros destacados hermanos como Francisco Pérez Bergali, Manuel Ávila Quijano, Manuel Millán Vela, Francisco Caballero, José Fernández, Sebastián Flores y otros muchos que se me escapan de la memoria, hicieron posible la supervivencia de esta hermandad señera del barrio de Triana. Y en este siglo XXI, aún sin haber transcurrido una década, la Hermandad tuvo que hacer frente a otro momento muy difícil y que gracias a Dios está ya superado, y no hay por qué citar nombres.
 
Pero es que resulta que el contenido de tu escrito se contradice de cabo a rabo con el de la exposición, que, como te voy a enumerar detalladamente, la figura de nuestro hermano de La O, mi querido hermano de sangre Ramón, aparece más que enaltecida en esta exposición. En la familia de La O no gusta de la vanidad, pero sí de reconocer justificadamente la memoria de cuantos han pertenecido a su nómina.
 
Para que te vayas haciendo una idea de la presencia de Ramón en esta exposición, parece que no la has visitado, y si así ha sido la has hecho muy fugazmente, a continuación te relaciono detalladamente en cuantos momentos o apartados aparece.
 
De los diecisiete módulos expositivos de fotografías, que por si no lo sabes, van acompañados de sus respectivos textos genéricos y pie de fotos, concretamente en el de “Vida de Hermandad”, tan solo el nombre de Ramón aparece  como Medalla de Oro de la Hermandad, junto con los de Antonio Ramos Mexias, que fue Prioste (Hermano Mayor de entonces) durante cuarenta y cinco años; Antonio Martín Alborch, Hermano Mayor Honorario; y Maruja Campos de Ávila, Camarera que fue de la Virgen y también Medalla de Oro de nuestra Archicofradía.
 
Pero es que la figura de Ramón, no hace falta a estas alturas recordarlo, porque todos los hermanos de La O bien la tienen guardada en su memoria, y los cofrades de Sevilla también en la suya, sí aparece gráficamente en varios de los módulos de la exposición. Veamos: en el de “La Sacramentalidad”,  Ramón aparece en una fotografía cuyo pie de foto dice: “Su Divina Majestad por la calle Castilla. Año 1962,”. En el de “Vía Crucis”, vemos a Ramón delante de las andas del Señor, cuya fotografía tiene el siguiente pie de foto: “El Señor a su paso por la calle San Jacinto, en el Vía Crucis conmemorativo de su III Centenario. Viernes, 14 de febrero de 1986”. En el módulo titulado “Las Riadas” –tú no conociste a Ramón de joven- podemos verlo en una de las fotografías subtitulada “Marzo de 1947. Cofrade La O y vecinos de la calle Castilla posan para el recuerdo”. Pero es que en el mencionado de “La Sacramentalidad”, además de aparecer Ramón en el texto genérico del tema, lo encontramos en cuatro, repito, en cuatro de las seis fotografías que lo componen, cuyos pies de fotos son como siguen: “Cofrades de La O en el “terraplén” a orillas del Guadalquivir, 13 de Junio de 1949”; “Taller de José Carrasquilla. Bordado del palio. Hermanos de La O junto a las bordadoras. Año 1957”; “Antigua Sala Capitular. 6 de Enero de 1960, tras la Misa Dominical”; y “Homenaje a los capilleres José Silva Sánchez y Manuel García “Trocha”. Año 1969”.
 
Pero es que aún hay más. No se si te darías cuenta -¿en verdad has estado en la exposición?- que el salón de los módulos expositivos y vitrinas con documentos de la Corporación, cuenta además con una pequeña sala, tan solo diez butacas, que por cierto siempre están ocupadas por lo atractivo del temario, donde se proyecta un exclusivo audiovisual sobre nuestra Archicofradía. Y da la casualidad que Ramón aparece en doce ocasiones, sí, doce ocasiones, y es el único cofrade de la Hermandad que figura solo en uno de los fotogramas. Estas son según sus pies de fotos: “23-5-1963 Procesión de Impedidos”, “1954 Junta de Gobierno” (siendo Hermano Mayor Antonio Martín Alborch),  “19-3-1972 Ramón Martín Cartaya, Pregonero de la Semana Santa” (para tu conocimiento es la única fotografía de la exposición en la que aparece solamente el personaje), “1983 Entrega de la ropa interior a la Esperanza de Triana con motivo de su Coronación Canónica”, “1969 Homenaje a José Silva y Manuel García”, “1955 Caseta de Feria de La O”, “Mayo 1975 Ensayo de hermanos costaleros”, “1982 La Banda de La O”, “18-11-1962 Patio junto al río Guadalquivir”, “4-10-1957 Peregrinación Mexicana”, “1962 Viático” y “6-1-1960 Tras la Misa Dominical”.
 
En cuanto a que mencionas el fallo de la Hermandad de no llevar a cabo la Coronación dentro de la Catedral, solo te puedo decir que, aprobada por el Cabildo General con gran mayoría, esta ubicación fue aceptada y visada por el Arzobispado. Muchas personas también pueden opinar que así fuere en la Catedral, pero como tu bien sabrás, que la decisión fue tomada por la Corporación y ella asume su responsabilidad en que la celebración sea en el Altozano, el mismo corazón del barrio de Triana.
 
Creo que faltas al sentimiento de todos los cofrades de La O y a los trianeros en general, cuando comentas textualmente “...es faltar al espíritu de unión entre el arrabal y el centro de la ciudad...”. Nosotros no presumimos de “doctores” pero sí de recordar a tantos cofrades que han desfilado por la nómina de nuestra Hermandad, y en este caso Ramón Martín Cartaya que, por todo lo que arriba te expongo, ocupa un lugar preeminente dentro de la exposición. ¿Por qué se ha celebrado la exposición en el centro de Sevilla? Pues por la sencilla razón de que la Hermandad de La O ha tenido el gesto de que esta exposición fuera celebrada en la otra parte del río –para los cofrades de La O ésta es la parte del río- como sirviendo de prólogo e invitando a los sevillanos, que también lo son los trianeros, a participar del gozo de la coronación de la Santísima Virgen de la O en sus Misterios Dolorosos.
 
Haces mención al actual Hermano Mayor de una forma bien peyorativa con eso de “… pegadito a la vara…”. Como habrás observado he puesto lo de Hermano Mayor con letra mayúscula, porque por eso mismo fue elegido asamblearia y democráticamente en Cabildo General por los propios hermanos, guste o no guste. Es nuestro Hermano Mayor y, como tal, entre otras muchas de sus “obligaciones” está la de asir la vara, por cierto dorada, cuando la circunstancia lo requiere, repito, guste o no guste.
 
En fin, Fernando, te invito a que acudas y visite de nuevo la exposición  “VIRGEN DE LA O, Corona para una devoción”, así es como se titula, para que compruebes por tus propios ojos que todo lo que arriba te he relacionado es cierto.
 
Recibe un cordial saludo de Carmelo Martín Cartaya"
 
Foto: Joaquín Corchero
 
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