El Santísimo acompañó de forma virtual al besamanos de la Divina Pastora de San Antonio
Francisco Santiago. En el besamanos a la Divina Pastora de San Antonio, se podía observar según en la posición que miráramos a la Titular, un fenómeno “divino”.
La Custodia que presidía tras la Virgen su retablo de la iglesia conventual de San Antonio de Padua, tiene en el lugar donde va la Sagrada Forma, un espejo.
El mismo, al recibir la luz de los focos, parecía contener a S. D. M., aunque la realidad no dejaba de ser un reflejo “divino”. La Pastora lucía bella, majestuosa a la espera del próximo 9 de noviembre, donde de nuevo recorrerá las calles de la feligresía en su ya tradicional Rosario de la Aurora.
Fotos: Francisco Santiago