La Real Maestranza de Caltanissetta

Francisco Santiago. Como ya les adelantamos, la Real Maestranza de Caltanisseta se hermanará con la Corporación del Pilar de Sevilla y participará en este mes de octubre, tanto en la procesión de la Virgen de la parroquia de San Pedro, como en los actos y procesión de la Virgen del Rosario de la calle Dos de Mayo. 

Caltanissetta es una ciudad de unos 80 mil habitantes situada en el centro de la isla de Sicília y centro neurálgico en las comunicaciones de la isla. Han sido celebres  desde la antigüedad sus minas de azufre y  la industria que existió a su alrededor siendo hoy famosa por sus cultivos de hortalizas y de flores.

En toda la región quedan muestras arquitectónicas de los reinados de los Borbónes, y culturares y asociativas de aquellos tiempos como veremos a continuación. La Real Maestranza de Caltanissetta es la institución histórica más antigua de la ciudad teniendo sus inicios por la Edad Media Siciliana.

Pero partiendo de datos fehacientes en 1520 era una organización de milicia de artesanos creada para la defensa de las costas y de la propia ciudad de los ataques de los turcos y piratas que rondaban por todo el Mediterráneo.

En 1551 obtiene el derecho de constituirse como Cuerpo único de Milicia Ciudadana, comandada por un Capitán de Armas. Su deber como policía municipal proviene del siglo XVII, cuando la milicia participaba en las procesiones de los santos protectores de la ciudad y en los ritos de la Semana Santa.

En 1806 el Rey Fernando IV de Borbón, visita la ciudad de Caltanissetta y queda asombrado por el espectáculo de la maestranza ciudadana en los solemnes cultos, llega a tanto su admiración que no duda en otorgarle él titulo de Real.

Después de las revoluciones  del ochocientos y la vuelta de los Borbones, el cuerpo es desmilitarizado, no sin oposición. De este periodo es el estandarte de la Real Maestranza que hoy conocemos en las diversas procesiones: el Santo protector de cada categoría en el centro  de un estandarte blanco, color del linaje de los Borbones.

Después de la unidad de Italia, la original cinta del estandarte que era azul, roja  y verde, se sustituye por la tricolor nacional. A finales de 1800 la Real Maestranza, pierde algunas prerrogativas, que había ejercitado desde hacia siglos.

Sin embargo la Real Maestranza sigue  integrada, y es testigo de todos los acontecimiento religiosos de la ciudad y conserva los antiguos rituales militares, eligiendo al Capitán, al Alférez Mayor, al Escudero, al Abanderado y al Alabardero, conservando sus uniformes tal cual eran por aquellos tiempo. Y siguen manteniendo el mismo significado del Cuerpo, eso sí con sus periodos de esplendor y con su decaimientos.

La Real Maestranza, agrupo en sus inicios, cuatro gremios de artesanos, después fueron a seis y en la actualidad son diez:

Los Herreros cuyo santo protector es San Adrián de Nicomedia.

Los Panaderos cuyo santo protector es San Miguel.

Los Fontaneros cuyo santo protector es San Egidio.

Los Barberos cuyo santos protectores es San Cosme y San Damián.

Los Decoradores y Pintores cuyo santo protector es San Lucas.

Los Albañiles cuyo santo protector en San Vicente Ferrer.

Los Marmolistas cuyo santo protector es San Pedro.

Los Carpinteros y Ebanistas cuyo santo protector San José.

Los Carpinteros y Ferrallistas cuya protectora en la Virgen de Loreto.

Los Zapateros, Peleteros y Tapiceros cuyo santo protector es San Crispin o Crispiniano.

Curiosamente  de este gremio de los zapateros es  un antiguo Capitán que tiene dos récords Guuines, uno de la bota más grande y otro de la zapatilla más pequeña.

Cada una de las categorías y siguiendo un turno proponen todos los años al Capitán de la Real Maestranza, que será la figura en la Semana Santa y destinado a ser nombrado Cavaliere della Repubblica.

También tiene en privilegio de ceñirse la banda tricolor con el escudo de la República italiana; desde 1982  recibe del Alcalde de Caltanissetta, la llave de la ciudad, se ciñe la espada y lleva el Crucifijo velado, durante la procesión del Miércoles Santo.

Hasta finales de 1822, también tenia el privilegio, durante la Semana Santa , en liberar a un condenado con pena leve y que podía ser recuperado.

El Martes Santo, el director espiritual de la Real Maestranza y el Capitán, acompañados de (Escudero, Alférez Mayor, abanderado y alabardero) y los Cónsules de las diez categorías, van a recoger al Santísimo Crucifijo a la Catedral para solemnemente entronizarlo en la capilla del antiguo colegio jesuita hoy biblioteca Luciano Scarabelli.

La ceremonia del Miércoles Santo, represente el momento central y más representativo de la Real Maestranza. Comenzando con un rito preparatorio hecho de gestos y símbolos  y una ceremonia muy particular, seguida del ritual de la procesión penitencial. A primero de la mañana, cada compañía acompaña desde su casa al Alabardero y al Abanderado al sonido del redoble de los tambores y  al sonido de las notas musicales de la Banda , se encaminan a la casa del Alférez Mayor y del Escudero.

Se forma un pelotón de honor junto a la plaza Garibaldi, se ponen a la cabeza del mismo y se dirigen  hacia la casa del Capitán donde le esperan en formación. Los ex Capitanes, acompañados del Maestro de Ceremonia entran en su casa ayudándolo a vestirse; tres toques de trompeta anuncian la llegada del Capitán, el cual saluda a la bandera y pasa revista a la Maestranza.

El Capitán viste al estilo del S. XVIII,  casaca y sombrero con pluma negra y escarapela tricolor, faja dorada en la cintura y espadín con empuñadura del mismo color

Todos se dirigen al Ayuntamiento, donde el Alcalde, hace entrega al Capitán de la llave de la ciudad. El cortejo se dirige al ex colegio de los jesuitas, donde se prepara la procesión penitencial encabezada por el Capitán que lleva en la mano el Crucifijo cubierto por un velo.

Acompañado por las banderas con lazos negros y los maestros artesanos de todos los oficios, el Capitán llega a  la Catedral donde hace la adoración a Jesús Sacramentado, después llega el cambio de las corbatas y los guantes, blancos por negros y se despliega la bandera. El Capitán de forma discreta y asistido por el Maestro de ceremonia, también se cambia de calzado.

A mediodía sale de la Catedral la solemne procesión  acompañando al Santísimo Sacramento, que es llevado por el Obispo en espléndida custodia  de oro bajo palio. La banda trasmite alegría y felicidad, las campanas y los morteros, se disparan como en los grandes días de fiestas. Después del recorrido por las calles del centro, la procesión vuelve a la Catedral y se imparte la Bendición Eucarística.

Toda la ceremonia del Miércoles Santo, esta cargada de significados, por ejemplo el  crucifijo velado que lleva el Capitán en sus manos, es en recuerdo de aquella antigua liturgia, del tiempo de pasión, donde se cubrían las imágenes sagradas y crucifijos, que eran descubiertos en la liturgia del Viernes Santo.

La velación, no era un signo de luto, sino más bien una invitación penitencial para penetra con la mirada en lo más profundo del corazón, para comprender el misterio del pecado y las maravillas de la salvación operadas por Cristo (Giovanni Speciale).

El Capitán portando la Cruz , se hace cargo de las culpas y pecados de todos.  Y tras orar como hemos visto ante el sagrario, recibe el perdón  y anuncia la liberación del hombre del pecado. Veíamos con anterioridad como se cambiaban los calcetines blancos por negros, pues ahora es al revés, se calzan los blancos y las banderas se ven liberadas de los lazos oscuros y se despliegan al aire de forma festiva  

En la tarde del Miércoles Santo, el Capitán recibe  en su casa, sentado en una butaca ricamente decorada, a las diez delegaciones, como signo de respeto y regalo, y después a las autoridades de la ciudad, en ese día el Capitán es el personaje más importante de la ciudad.

El Viernes Santo vuelve la Real Maestranza   a las calles de Caltanissetta, para acompañar al Señor de la Ciudad , el Cristo Negro, protector de la ciudad desde 1625, que es llevado  dentro de un baldaquino dorado en forma de corona, signo de su soberanía, sobre las espaldas y con los pies descalzos, en la procesión de los “fogliamari”, buscadores de verduras silvestres. A lo largo de la procesión, estos hombres,  rompen el silencio  con sus estremecedores “lodate” lamentos bíblicos en el más arcaico dialecto. Dos voces pasan de repente de los tonos bajos y profundos a los tonos agudos y lacerantes, intercalándose con el grito coral “Viva la misericordia de Dios.   

El domingo de Pascua, la Real Maestranza , va a recoger al palacio episcopal, al Señor Obispo para la celebración de la misa pascual y tras ella el Capitán devuelve la llave de la ciudad al Señor Alcalde.

Curiosamente en Caltanisseta, hay Semana Santa, pero no hay Hermandades, lo más parecido a ellas es la Real Maestranza , el resto, son organizaciones particulares y familiares como los Piccoli Grupos o “Varicedde” que salen en Miércoles Santo por la noche o los misterios o “Vare” del Jueves Santo, tradición que proviene del siglo XVII y que a partir de 1881, cuando unos mineros de la mina de azufre de Gessolungo   fueron salvados de una muerte violenta y decidieron hacer un misterio en agradecimiento, desde esta fecha el estilo napolitano , conducidos por los artistas Francesco e Vicenio Biangari fue dando paso a la “Vare” que hoy pasean por la calles de Caltanissetta, las imágenes de la pasión de Cristo. Hoy en día  son  diversas organizaciones de distintos barrios de la ciudad., encargados del montaje de estos inmensos tronos, repletos de flores originales de la tierra.

Son dieciséis grandes grupos los con desfilan por la ciudad, subidos en plataformas tiradas a motor y los desfilen suelen tener una duración de unas siete horas. Todos llevan su banda de musuca y se da la nota curiosa, que al finalizar la procesión. Todas las bandas se reúnen sobre las tres de la madrugada y juntas tocan la “spartenza” la salida.

Pero Caltanisseta tiene  dos grandes contrastes en la Semana Santa , por un lado las  grandes “Vare” del Jueves Santo y por el otro los pequeños pasos del Miércoles Santo “la “Varicedde”, podíamos llamarlas las miniaturas del Jueves Santo, tanta fue la miniatura, que eran llevadas en la mano por niños, después los escultores Salvatore Emma y Salvatore Capizzi, en los inicios del siglo XX, inician los pequeños grupos sagrados que no llegan hasta hoy. Curiosamente estos pasos pertenecen a familias particulares, que los conservan en sus casas. En la actualidad se que se esta intentando, que niños de distintos colegios, puedan sacarlos a hombros

Pues bien esta representación de Caltanisseta, unida a sus autoridades civiles, van a visitarnos con motivo del Centenario  de la Hermandad de la Virgen del Rosario de la Calle Dos de Mayo, de cuya hermandad  la Real Maestranza de Caltanissetta esta Hermanada, tambien vienen a las Jornadas Marianas, Rosario Fe y Devoción, que se celebraran del 7 al 11 de octubre, y saldrán en la Procesión de la Virgen del Rosario el domingo 11 y al día siguiente en la procesión de la Virgen del Pilar.

También  estará presente  la  Asociación la Veste Rossa, con su Presidente Giani Taibi y su Vice-Presidente Gigi Montenegro.   

Fotos: Hermandad del Pilar