La patrona de Santa Catalina, la Virgen del Rosario, procesionó con todo su esplendor

Daniel García Acevedo. En la tarde de ayer, día 1 de noviembre, volvió a recorrer las calles de su feligresía la Virgen del Rosario, patrona del barrio de Santa Catalina por decreto del cardenal Luis de la Lastra, desde que en el año 2002 se fusionara con la hermandad de la Virgen del Carmen del mismo templo y reanudara sus cultos y procesión.

Por las obras en la iglesia de Santa Catalina la salida procesional se efectúa desde la parroquia de San Román. En el cortejo se dieron cita los estandartes de Santa Lucía, los Gitanos y la Exaltación, con sus hermanos mayores y la delegada de glorias, Esther Ortego. También estuvo unos instantes el presidente del consejo de cofradías, Adolfo Arenas.

Al frente del martillo debutó el capataz Carlos Morán, que hace lo propio en la hermandad de Valvanera y en el paso del Señor de la Presentación al Pueblo de San Benito. Una de las primeras levantas la hizo el nuevo párroco Manuel Cotrino.

La Virgen lleva el Niño Jesús en el brazo derecho, cosa poco habitual entre las tallas marianas.

Durante el recorrido la Virgen del Rosario visitó los conventos del Espíritu Santo y de Santa Ángela de la Cruz, donde las hermanas le cantaron una oración.

La banda de música Ntra. Sra. de la Soledad de la Algaba puso las notas musicales de la procesión. En la esquina de San Luis con Doña María Coronel se interpretó la marcha "A ti, Manué" tocando el solo un trompeta desde un balcón.

 

Fotos: Juan Alberto García Acevedo.