Inaugurada la Exposición ‘Bajo un manto de Amor’
Arte Sacro. La Primitiva Archicofradía Pontificia y Real Hermandad de Nazarenos de la Sagrada Entrada en Jerusalén, Santísimo Cristo del Amor, Nuestra Señora del Socorro y Santiago Apóstol, en colaboración con la Fundación Cajasol, organiza del 9 al 18 de febrero la exposición titulada ‘Bajo un manto de Amor’, iniciativa impulsada con el fin de presentar los trabajos de restauración del manto procesional de Nuestra Señora del Socorro.
En la exposición se presentarán los trabajos de restauración del manto procesional de Nuestra Señora del Socorro realizados en el taller del bordador y restaurador Manuel Solano Rodríguez, bajo la supervisión y asesoramiento del Instituto Andaluz del Patrimonio Histórico (IAPH).
La intervención, que se ha prolongado durante más de 24 meses, ha permitido recuperar el esplendor de esta joya del bordado sevillano que se estrenó el Domingo de Ramos de 14 de abril de 1957, cumpliéndose actualmente 66 años desde dicha efeméride.
La exposición, que podrá visitarse de lunes a sábado en horario de 11 a 14 y de 18 a 21 horas, consta de tres salas. En la primera de ellas se ahonda en las peculiaridades que rodearon la ejecución de esta pieza textil. Diseñado por el magnífico dibujante Joaquín Castilla, el manto de la Virgen del Socorro se ejecuta entre 1953 y 1957.
La hermandad confió el trabajo de bordado a la maestra Conchita Fernández del Toro, que a sus 71 años acababa de cerrar su propio taller de bordados y pensaba más en la jubilación. Para su ejecución, la Hermandad montó su propio taller en las hoy dependencias de la calle Villegas y facilitó todos los materiales, pagando semanalmente a la maestra y a sus bordadoras. Bordado exclusivamente en hilo de oro, el manto destaca por el complicadísimo diseño de los módulos ornamentales y por la gran interpretación técnica de las artesanas bordadoras. La hermandad conserva abundante documentación gráfica, diseños y otras piezas de los 4 años, 2 meses y 7 días que duró el proceso de ejecución del manto. Entre ellos destaca una placa forjada por Seco para que las bordadoras se hicieran una idea del realce que debía tener el bordado. El coste económico de esta obra se acercó casi al millón de pesetas. La cantidad de oro empleada en su ejecución y la minuciosidad del trabajo de ejecución convierten al manto de la Virgen del Socorro en una pieza casi irrepetible hoy día. La maestra Conchita Fernández del Toro recibiría por esta magnífica obra la Medalla al Mérito en el Trabajo en su categoría de plata, distinción que le fue impuesta en las dependencias de la hermandad.
La segunda de las salas estará dedicada a exponer el laborioso proceso de restauración del manto. Antes incluso de decantarse por el taller que ejecutase los trabajos de restauración, la hermandad se propuso reconstruir digitalmente el diseño original del manto. Seis meses de trabajo empleó el arquitecto Sergio Cornejo en recrear la plantilla digital de la obra tal y como se concibió, corrigiendo las deformaciones que ha sufrido por su manipulación con el paso de los años. Para realizar este estudio digital del diseño del manto se llegó a emplear un dron en el interior de la Colegial con el fin de tomar imágenes cenitales de la pieza textil.
El 24 de noviembre de 2020 el manto fue trasladado al taller del bordador y restaurador Manuel Solano Rodríguez, en Morón de la Frontera. Tras los ventanales del número 22 de la calle Jabonería, las manos maestras de una decena de bordadores y bordadoras se han afanado diariamente en devolver a esta joya de la artesanía sevillana el esplendor perdido con el paso del tiempo. Hallar un terciopelo de una tonalidad y una composición similares al que se empleó en la confección del manto no ha resultado tarea fácil. Finalmente, después de una ardua búsqueda, el nuevo terciopelo se localizó en la ciudad italiana de Lecco, cercana al lago Como. Para la limpieza de parte de los bordados se ha contado con la colaboración de la restauradora textil Laura Pol. El manto se ha rematado en su perímetro con una blonda de encaje de bolillo de oro fino, copia de la antigua, realizada por el encajero sevillano Alfonso Aguilar y cuya longitud supera los 18 metros.
Por último, en la tercera de las salas podrá admirarse el magnífico manto restaurado, obra cumbre del bordado sevillano que aúna la singularidad de su ejecución, su indiscutible calidad y riqueza artísticas y su gran valor sentimental para los Hermanos del Amor.
Comisariada por el hermano Joaquín Ruíz Franco-Baux, en la muestra también podrán admirarse la saya marfil y la toca de sobremanto pertenecientes al ajuar de la Virgen del Socorro y que han sido restauradas en el IAPH. Ambas piezas fueron diseñadas por Joaquín Castilla a juego con el fastuoso manto procesional de la dolorosa y realizadas, igualmente, en el taller de bordados que, bajo la dirección de la maestra bordadora Conchita Fernández del Toro, montó la hermandad en las dependencias de la calle Villegas.
La exposición “Bajo un manto de Amor” ha sido inaugurada este jueves 9 de febrero con la presencia de Juan Manuel Rodríguez Domínguez, Alcalde del Ayuntamiento de Morón de la Frontera, Juan Carlos Cabrera Valera, Teniente de Alcalde, Delegado del Área de Gobernación, Fiestas Mayores y Área Metropolitana del Ayuntamiento de Sevilla, Juan José Primo Jurado, Director del Instituto Andaluz del Patrimonio Histórico, Antonio Pulido Gutiérrez, Presidente de la Fundación Cajasol, Juan Cruzado Candau, Manuel Solano Rodríguez, bordador y restaurador moronense y Joaquín Ruíz Franco-Baux, comisario de la exposición.
Fotos: Juan Alberto García Acevedo.