Provincia. Santa Marta Patrona de La Algaba. Por Mª José Gallardo
La localidad de la Algaba celebra el próximo 29 de julio la festividad de su Patrona, Santa Marta.
Fiesta singular por la devoción imperecedera y callada de los algabeños a su Santa Patrona y por la forma y actos en los que se manifiesta. Así el 28 de julio, víspera, y el propio día 29, una inquietud recorre el corazón de todos los algabeños, tanto de los que residen en el pueblo, como de los que se encuentran fuera de él. Deseando escuchar los toques de clarín desde las cuatro caras del campanario de la iglesia parroquial de Ntra. Sra. de las Nieves. Hace algunos años se tocaba desde la torre de los Guzmanes.
Toques únicos que se lanzan al viento y que emocionan a todo un pueblo que se congrega en la plaza para oírlo de cerca y los niños que corren, para verlo, de un lado a otro.
El primero el 28, a las nueve de la noche; el 29 de julio en tres ocasiones: a las doce del mediodía, tres de la tarde y nueve de la noche. Antiguamente se realizaba en las horas canónicas de maitines (siete de la mañana), sexta (doce del mediodía) y vísperas (siete de la tarde).
El sonido de la melodía de este toque es especial, distinto a otros toques de clarines que puedan pensarse. El músico que lo ejecute tiene que poseer una capacidad pulmonar excepcional, porque debe escucharse en los pagos de las Arenas, en la Dehesa y hasta en el Palmar de la Torre. Por una razón, originaria posiblemente, de atención a los que se encontraban trabajando en el campo y pudieran regresar al pueblo en ocasiones de peligro, de posibles incursiones en zona de frontera de territorios ocupados por minorías.
Lo cierto es que se sacraliza con el culto a Santa Marta a partir de 1660. Cuando, según consta en el libro de Bautismo (folio 138 y 138 vto) de la Parroquia, por el cura Pedro de Alvar en 1788 se describe la singularidad de la designación de su patronazgo. Señala que debido a una epidemia de peste que asolaba la población, en la que morían diariamente entre 18 y 23 personas, el cura beneficiario de la población en aquel momento, convoca al pueblo para que a voz general eligieran un patrono que fuera especial abogado que los librara de semejante mal. Y reunidos en la iglesia, en el ofertorio de la misa, después de varias promesas que se hicieron, mando sacar una cántara que incluía las cedulas con los nombres de los santos del almanaque. Un niño de corta edad saco dos papeletas con los nombres de san Laureano y Santa Marta; y ante la duda de a cuál de los dos correspondía la elección, se procedió a encantarar de nuevo las cedulas y se repitió el acto con un niño de seis años; leída la misma resulto ser Santa Marta.
Se solicitó en ese acto su protección y ceso el contagio, pues ningún vecino enfermo a partir de ese momento, excepto el cura Bartolomé Martín de los Salvadores, que al tercer día de la elección se contagió y murió.
En 1649 con motivo de otro brote de dicha enfermedad, en la que fallecieron 417 personas, se reiteró la promesa por el pueblo, el clero y los marqueses de la villa.
La Imagen de Santa Marta se venera en un altar, procedente de la desamortizada iglesia de San Miguel de Sevilla, desde la segunda mitad del siglo XVIII, en el lateral del evangelio.
La Imagen del siglo XVII, de estilo barroco policromada y estofada se atribuye a discípulos de Martínez Montañez. Este año por tanto se conmemora el 425 aniversario de su elección como Patrona.
La Agrupación Parroquial de Santa Marta y San Bartolomé organiza por este motivo diversos actos para conmemorarlo.
Este año, los toques de las 12 y las 15 horas serán en la torre de la iglesia y los de las 21:00 horas en la capilla de Nuestro Padre Jesús, por encontrarse la Santa en ella a causa de las obras que se realizan en la parroquia.
El día 29 al finalizar el toque del clarín se celebra solemne Misa y Procesión.