Provincia. El momento en el que la Divina Pastora es despojada de su sombrero anuncia las Fiestas Mayores de Cantillana
Arte Sacro. En la noche del 8 de septiembre, la calle Martín Rey de la localidad de Cantillana es la apoteosis del fervor cuando la Divina Pastora es despojada de su sombrero en el transcurso de su procesión triunfal de gloria. Ese momento, tan icónico y a la vez tan efímero, es el cartel anunciador de las Fiestas Mayores de la Divina Pastora, una obra que lleva el inconfundible sello del artista pastoreño David Payán.
El bello rostro de la Divina Pastora llena el cartel en la traducción pictórica de un momento que forma parte de la idiosincrasia cantillanera. La composición plasma ese instante en el que el sombrero es retirado por manos sacerdotales y nace la luz bajo una copiosa lluvia de flores, al tiempo que estallan cientos de cohetes y fuegos de artificio.
Como explicó el autor, la obra plasma el “momento especialísimo, esperado durante todo el año, momento cumbre de Cantillana en que extasiada ante su Divina Pastora vive unos instantes de gloria mientras se descubre su purísima frente”. Sobradamente conocido, “narrado por escritores, poetas y músicos, intentando definir lo que se vive anualmente en esa calle, santo y seña de Cantillana”, este instante sublime “pictóricamente no se ha representado tanto”, por lo que Payán ha optado por “tomar este momento del sombrero, tan propio y tan nuestro, como anuncio de las Fiestas Mayores de 2025”.
Bajo el título de “El Momento”, el cartel “se centra en la Divina Pastora y en su bellísimo rostro, que tanto significa para los pastoreños y pastoreñas, que llevamos grabado en el corazón y en la mente; la cara de la Pastora, bonita y fina como ninguna”, explicó el autor en la presentación. En esta obra “encontramos una dialéctica de oposición entre la figuración más absoluta en la Divina Pastora y la abstracción del fondo, conformando un archipiélago en el que la diversidad y un enfoque diferente trabajan en una dirección conjunta, a pesar de las diferencias entre los dos lenguajes”. El uso del color “impregna a la Virgen” a partir de un fondo “que se inicia en abstracto” para ir incorporando “elementos figurativos como los arcos de Martín Rey”. Igualmente, “esa explosión que vemos detrás de la Pastora” es un trasunto del “júbilo y la alegría del pueblo pastoreño en el momento que el Padre Álvaro le quita el sombrero”.
El cartel “muestra la relación entre las técnicas de pintura más tradicionales y las reminiscencias del arte abstracto y urbano”, uniendo “lo tradicional con la vanguardia” y todo ello “sin perder la esencia de lo que está representando, las Fiestas Mayores de la Divina Pastora de Cantillana, con fuerza, con alegría y con la Divina Pastora como protagonista absoluta de esta obra”.
David Payán, cantillanero, pastoreño, y graduado en Bellas Artes por la Universidad de Sevilla, cuenta con una prolífica trayectoria como cartelista para hermandades de toda la geografía nacional, así como diseñador de logotipos de distintas efemérides. Para la corporación pastoreña de Cantillana ha realizado los carteles para la Romería de la Divina Pastora en los años 2020 y 2023, siendo además el autor de los logotipos del tercer centenario de la hermandad de la Divina Pastora de Cantillana, del Año Santo Jubilar, celebrados ambos en 2020, y la marca gráfica que aglutina las múltiples celebraciones que coinciden este año.
El cartel fue presentado el pasado viernes día 8 de agosto, a falta de un mes para la fiesta de la Sacrosanta Natividad de la Virgen, el día de la Pastora de Cantillana. El acto, celebrado en la Casa de la Cultura de la localidad, dio inicio con una proyección que combinó imágenes de las vísperas y las fiestas pastoreñas con el proceso de creación del cartel. Con la declamación del pasaje del magistral pregón de Francisco Montero Galvache que ensalza dicho momento en la calle Martín Rey, y la reproducción de los vivas del Padre Álvaro cuando le quita el sombrero a la Virgen en la inigualable noche del 8 de septiembre, fue descubierto el cartel, que arrancó una sonora y prolongada ovación.
El año 2025 será en el que la Imagen de la Divina Pastora vuelva a salir en Romería, un acontecimiento que sin duda será de los más significativos en la historia reciente de esta hermandad y con el que el pueblo se volcará plenamente tras 10 años sin hacerlo al truncarse la romería de 2020 por la pandemia. Pero, igualmente, en 2025, además de unirse a la celebración del Año Santo Jubilar, la hermandad conmemora los 225 años de la epidemia de fiebre amarilla de 1800, en la que el pueblo de Cantillana se encomendó a su Pastora en un Rosario público que presidió el Simpecado con la pintura fundacional, que aún se conserva y venera en la hermandad, quedando libre de la enfermedad y sin que se registrasen fallecidos.
Se cumplen también 125 años de la asistencia del beato cardenal Marcelo Spínola a los cultos pastoreños. Un hecho histórico ocurrido en 1900, a raíz del cual el prelado concedió autorización a la hermandad para la construcción del camarín de la Virgen, así como su propiedad, y fue nombrado Hermano Mayor Perpetuo, cargo que además ejerció activamente.
Del mismo modo, se cumple el 75 aniversario del primer voto de la Realeza de María, emitido junto con otras hermandades sevillanas en la iglesia de San Martín el 26 de noviembre de 1950. Finalmente, en 2025 también se cumplen 275 años del fallecimiento, en 1750, del venerable padre Fray Isidoro de Sevilla, iniciador y propagador de la advocación de la Divina Pastora de las Almas, que desde 1720 se venera en Cantillana.
Foto: Hdad.