El Barroco de Cayetano de Acosta junto al Barroco de Juan de Mesa
Francisco Santiago. Tal y como les avancé ayer, la nueva sede del Gran Poder es la iglesia del Convento de Santa Rosalía donde el imaginero y tallista Cayetano de Acosta realizó un mayor número de trabajos, pues de su gubia son los 11 retablos que lo componen, incluyendo el Altar Mayor.
Este altar efímero para el Gran Poder, en el cual sólo estará seis meses, fue construido entre 1761 y 1763, como todo el conjunto. Es de estilo barroco pero con la característica tan peculiar de este autor, el movimiento y ondulaciones. En él podemos ver las imágenes de Santa Clara y San Antonio de Padua, en los laterales, mientras que es la Inmaculada la que preside el Altar.
Las imágenes de María Santísima del Mayor Dolor y Traspaso y la de San Juan Evangelista, se han instalado en los dos pequeños retablos que hay junto al Altar Mayor.
En el ático, podemos ver una imagen de la Titular del Templo, Santa Rosalía. Curiosamente, en la bóveda del presbiterio podemos ver pinturas que representan al Padre Eterno entre ángeles, junto a San Lorenzo y San Esteban, atribuidas a Juan de Espinal. A la entrada del templo se han situado a cada lado las imágenes de Fray Diego de Cádiz y del Cardenal Segura, también propiedad de la Hermandad del Gran Poder.
Lo cierto es que en la hospedería que tienen las hermanas capuchinas, jamás habían recibido a un huésped tan singular, tan especial y tan querido. Un huésped que, de seguro, habrá cambiado en un 100 por 100 la realidad cotidiana de las hermanas, pues de estar con zonas en ruinas y gritando en silencio su pobreza, han recibido la visita del más grande, el más sábio y el que, de seguro, ya habrá recomendado a sus hijos que conforman la Hermandad que se aseguren que las hermanas que le dan cobijo tengan asegurado su futuro… Tan cierto como que hemos llegado en Arte Sacro a los 12 millones de visitas.
¿Alguien lo duda?
Fotos: Francisco Santiago