¿Jugando a sacar pasitos a la calle?. Ángel Gómez Guillen. Iglesia de Sevilla
Me encanta ver a los niños sevillanos en mayo por la calle con sus pasitos de cruz de mayo. Inocentes y positivos juegos de niños. Pero lo que no veo tan inocente por parte del Ayuntamiento de Sevilla es querer “jugar a los pasitos” en febrero con motivo de la Exposición de Munarco organizando una procesión que saldría de la Catedral.
Eso decía la prensa del 14 de julio pasado y no me consta que para ello en estas fechas haya habido al menos algún tipo de permiso por parte de la autoridad diocesana competente.
Me parece muy bien que se expongan pasos de otras ciudades españolas en la Catedral , por la innegable dimensión religiosa y cultural que tienen , pero que el ayuntamiento se meta a organizar un acto publico religioso como es una procesión con los citados pasos me huele muy mal.
Me huele al laicismo de estado, tan querido por los actuales gobernantes, que quiere reducir nuestras procesiones de penitencia y gloria a un acto cultural. Si yo fuera responsable de esas cofradías de otras ciudades me negaría a traer mis imágenes a Sevilla para ser manipulada de semejante forma. Que yo sepa las procesiones con los pasos son fundamentales un acto de la piedad popular; no del “pueblo” políticamente hablando, sino del pueblo de Dios que es la iglesia y es a ella a la que le corresponde organizar y llevar a cabo las procesiones con las sagradas imágenes.
Artículo aparecido en la hoja “Iglesia de Sevilla” y firmado por Ángel Gómez Guillen