Provincia. Nuestra Señora del Rosario, Patrona de Capataces y Costaleros de Carmona, paseó por la feligresía de San Pedro

Manuel Pinto Montero. Un año más el sol quiso reflejarse en el bello rostro de Nuestra Señora del Rosario durante la gloriosa procesión que tiene lugar cada último domingo de Adviento. La Virgen del Rosario, Patrona de Capataces y Costaleros, recorre las calles de su feligresía de San Pedro acompañada en su cortejo por las Hermandades que tienen su sede en este bello templo de Carmona.

Nuestra Señora del Rosario es una talla anónima fechada de finales del siglo XVII o principios del siglo XVIII que recibe culto en un bello retablo del siglo XVIII en la histórica Parroquia de San Pedro. Tiempo atrás tuvo Hermandad propia.

La Santísima Virgen procesionó sobre paso que combina la madera tallada en su color y dorada, procede este paso de la Hermandad de los Escolapios de Granada.  En las esquinas cuatro candelabros dorados de guardabrisas, cedidos por la Hermandad de la Humildad, iluminan la bella imagen.

En esta ocasión la Virgen del Rosario lució saya y manto de brocados de tonos claros. En sus manos sostiene el divino Infante que luce túnica a juego con el manto de la Santísima Virgen. De la saya pende un rosario formando el anagrama de María. Sobre sus sienes porta la Virgen del Rosario corona de plata y queda enmarcada en ráfaga del mismo metal. A sus plantas sobre la nube podemos encontrar una media luna de metal plateado.

Bello fue el discurrir de la procesión por la calle San Juan Grande donde el sol se reflejó en su rostro en una fría mañana de Adviento. Buscaba después las calles más estrechas de la feligresía siendo testigo de ello la esbelta torre de San Pedro. La calle Aguditas o Tahona mostraron la maestría de capataces y costaleros en las revirás de estas estrechas calles de Carmona mientras la Asociación Filarmónica El Arrabal de la propia localidad ponía sus sones tras la Santísima Virgen del Rosario.

… a Miguel Ángel Pérez García, capataz de Nuestra Señora del Rosario.

Fotos: Manuel Pinto Montero.